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Chapter 37 - Capítulo 37- La Espada

Una multitud de espectadores comenzó a reunirse. Estaban acostumbrados a ver a Han Sen siendo intimidado.

—¿Cómo quieres que te compense? — dijo Han Sen con calma, mirando a Liu Feng acercarse a él.

—Déjame patearte el trasero — dijo Liu Feng, lanzando un puñetazo en la cara de Han Sen.

El golpe de Liu Feng fue feroz y rápido. Si Han Sen hubiese sido golpeado, su nariz ya estaría rota.

Cuando todos pensaban que lo alcanzaría, Han Sen inclinó su cuerpo y esquivó el golpe.

Mientras tanto, hizo tropezar a Liu Feng con su pierna y lo hizo caer de bruces.

Liu Feng cayó tan fuerte que su nariz sangraba y sus ojos lagrimeaban. Ardiendo de ira, sacó su espada aleada alfa de la funda y arremetió contra Han Sen. —¡Pequeña escoria! ¿Cómo te atreves a resistirte? Te mataré.

Han Hao tenía sentimientos encontrados al ver esto. Aunque despreciaba a Han Sen, Han Sen seguía siendo su primo, y Han Hao se sentía terrible al verlo intimidado y tal vez asesinado.

Pero si ayudaba a Han Sen y la gente sabía que era el primo de Fenómeno de Trasero, ¿cómo podía quedarse en el Refugio de Armadura de Hierro?

Tras haber dudado un momento, Han Hao giró la cabeza hacia un lado, evitando deliberadamente ver a Han Sen. Han Hao pensó que inmediatamente oiría los gritos de Han Sen, pero los gritos que escuchó no fueron de Han Sen, sino de Liu Feng.

Han Hao rápidamente se volvió para ver lo que había pasado y no podía creer lo que veía. La espada aleada alfa de Liu Feng estaba ahora en la mano de Han Sen y el mismo Liu Feng estaba inmovilizado en el piso con su brazo retorcido detrás de él, gritando, demasiado asustado para luchar.

Han Hao no vio cómo sucedió, pero otros lo vieron claramente. Estaban tan sorprendidos que quedaron ahí con la boca abierta.

Cuando Liu Feng arremetió su espada en Han Sen, todos pensaron que Fenómeno del Trasero estaba condenado. Pero tan pronto como Liu Feng tomó la espada aleada alfa, Han Sen tomó su mano y se giró, haciendo que Liu Feng cayera de rodillas. Han Sen luego lo golpeó en la espalda con un rodillazo y lo mantuvo en el piso.

Nadie podía creer que Fenómeno de Trasero tuviera tales movimientos, estaban todos aturdidos. No había ningún sonido a excepción de los gritos de Liu Feng.

—¿Qué están haciendo? Maten a este bastardo ... ¡Ay! — ordenó Liu Feng a los espectadores mientras gritaba.

¡Crac!

Han Sen le rompió el brazo antes de que pudiera terminar la frase. Cubierto de sudor frío, Liu Feng estaba mortalmente pálido.

Los amigos de Liu Feng al ver esto corrieron hacia Han Sen, levantando sus armas. Hen Sen aún sostenía la espada aleada alfa de Liu Feng en su mano, y la usó para bloquear el arma aleada con la cual se le atacaba. Para su sorpresa, el arma fue cortada a la mitad por la espada de Liu Feng instantáneamente.

Este idiota tenía una gran espada aleada alfa. Vale al menos uno o dos millones, pensó Han Sen y decidió no devolverla.

En poco tiempo, todas las otras armas fueron cortadas por Han Sen, y sus dueños se asustaron. Nadie se atrevió a seguir atacando a Han Sen.

Han Hao estaba aturdido, casi pensando que estaba en un sueño. Liu Feng tenía una calificación de fuerza de 6.7 y una buena arma, por lo que había recibido mucha atención en el Refugio de Armadura de Hierro.

Aunque Han Hao tenía un arma de alma de bestia mutante, sabía que no podía igualar a Liu Feng. De repente, Liu Feng se convirtió en el que yacía en el piso sin su arma, mientras que Han Sen se convirtió en el ganador. El cambio fue tan drástico que Han Hao no pudo procesarlo.

—¿No había sido rechazado tanto por Qin Xuan como por Hijo del Cielo desde que entró al refugio? ¿Acaso no había fracasado al intentar cazar incluso a una criatura primitiva? ¿No es así…? — Han Hao miró a Han Sen sin entender, con una variedad de emociones complejas enredadas en su mente.

Han Sen no continuó la pelea con el resto, pero volvió a quitarle la funda a Liu Feng, se colgó la funda en su propio cinturón y guardó su nueva espada en su nueva funda.

—La próxima vez que desee una indemnización, solo acércate a mí— dijo Han Sen mientras se dirigía hacia la puerta de Refugio de Armadura de Hierro. Todos los espectadores lo miraban como si fuera la primera vez que lo veían.

—¡Deténgase!

Alguien se acercó montando un arzón de alma bestia cuando Han Sen estaba a punto de entrar por la puerta. Era Luo Tianyang, el secuaz de Hijo del Cielo.

—Luo, Fenómeno de Trasero me rompió el brazo y tomó mi espada. Tienes que vengarme —gritó Liu Feng con deleite al ver a Luo Tianyang.

—Imbécil —espetó. Luo Tianyang miró primero a Liu Feng y luego a Han Sen. —Me preguntaba quién era tan atrevido a lastimar a mi hombre. Entonces, eres tú, escoria.

Luo Tianyang sacó su látigo aleado y azotó a Han Sen.

Han Sen se detuvo y empuñó su espada contra el látigo. Cuando las dos armas colisionaron, Han Sen y Luo Tianyang se estremecieron.

Luo Tianyang exclamó de repente: —¿Cómo es que tienes tanta fuerza?

La propia calificación de fuerza de Luo Tianyang había alcanzado 9.6. Aunque con este azote no había utilizado toda su fuerza, Han Sen debía haber tenido al menos una calificación de 8.0 para poder bloquear su látigo, por lo que no lo podía creer.