La división telequinetica era una tarea difícil por la cual requería capacidad de control detallada en telequinesis. Antes de obtener la habilidad del Niño Psíquico del Demonio, el entrenamiento de Sin Costura sería tan difícil como que a un niño de preescolar se le pidiese resolver una pregunta académica de la escuela secundaria. Sin embargo, no era difícil para él entrenar eso ahora. En una sola mañana, logró utilizar su Telequinesis Divina para dividir una hebra de hilo en dos, dos en cuatro, y así sucesivamente... Finalmente, logró dividir el hilo en 300 de ellos, completando el nivel-1 de Sin Costura. Más tarde, comenzó a practicar el control de los 300 hilos.