—¿Dinero? Ya se me acabó, lo usamos para comprar este departamento. Si lo quieres tendrás que esperar a que ahorre un poco, cuando lo haga, te pagaré.
—De acuerdo, está bien —dijo Huo Mian y se dio vuelta para marcharse.
—Huo Mian, ¿qué sucedió?
—Zhixin estuvo en un accidente automovilístico —respondió Huo Mian con voz rasposa.
—No deberías venir a mí por algo de esta magnitud, deberías ir a buscar al rico de tu ex-novio —le retrucó el repentinamente.
Huo Mian no le respondió, pero su cara demostraba decepción. Se dio vuelta para irse.
Luego de lo que dijo, Ning Zhiyuan de inmediato lamentó su decisión. ¿Por qué tuvo que decirle algo así?
—Zhiyuan, ¿de quién es esa voz? ¿Por qué aún no regresas? —dijo una voz femenina desde la habitación.
En realidad Ning Zhiyuan aún tenía dinero en su tarjeta. Había unos cien mil yuanes en su cuenta que él había planeado usar para la boda.