Toda la gente de entre bambalinas se congeló.
La persona que había llegado era Tangning. Se suponía que estaba en el programa de entrevistas de Feng Cai, pero en este momento, había aparecido frente a Li Danni.
No solo eso, detrás de ella la seguían An Zihao y cuatro fornidos guardaespaldas extranjeros. Detrás del escenario, los ojos de todos se agrandaron mientras cubrían sus bocas, esperando un buen espectáculo que ver.
Tangning emitió un aura fría; sus ojos eran penetrantes como los de un águila. Miró al agente de Li Danni con una ira helada. Aquel estaba aterrorizado por la mirada en los ojos de Tangning. Se cubrió la mejilla y trató de decir algo, pero no salió nada.
An Zihao aprovechó la oportunidad para ayudar a Long Jie a levantarse del suelo cuando notó las huellas rojas en sus mejillas.
—Tangning...