—¿Todavía puede salvarse Xia Hanmo? No ha sido nada fácil limpiar su nombre. Ahora que lo pienso, merecía que la calumniaran en el pasado.
Long Jie jamás olvidaría todo lo que Lin Qian había hecho por Xia Hanmo, y todo para que la malinterpretara diciendo que calumniaba a su novio. Al pensar en ello, Long Jie se sintió hervir por dentro. Se moría de la tentación de empujar a Xian Hanmo y arrojarle unas cuantas bofetadas en la cara.
—Ning ha dicho que la misma cantidad de confianza que tiene ahora Xia Hanmo es la misma cantidad de arrepentimiento que sufrirá más tarde.
—Jefe, ya he concertado una cita con el hijo del jefe de la estación. La cita será mañana a las siete de la tarde.
—Dile a Lu Che que quiero ver al director del canal y pídele que no se lo diga a nadie. Es un secreto —solicitó Mo Ting en voz baja mientras le daba una palmadita en la cabeza a Tangning.
