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Long Jie se encogió de hombros; ella tampoco entendía las reglas de esta nueva industria.
Con el fin de acelerar el proceso de encontrar la verdad, Mo Ting le ordenó a Lu Che que se pusiera en contacto con el dueño del sitio de la novela digital y le pidió que le proporcionara pruebas. Aunque la contraparte no era un gran imperio como Hai Rui, tenían sus documentos legales en orden y rápidamente ubicaron sus archivos de hace tres años. El contrato oficialmente firmado de "El Rastreador" demostró que la novela existía tres años atrás. Esto era una prueba sólida.
—Presidente, todas las señales apuntan a un plagio obvio y la contraparte ya nos ha proporcionado pruebas. El guión del señor Wu está sin duda plagiado.
Mo Ting miró el contrato ligeramente amarillento y leyó el contenido en detalle antes de tirarlo a un lado.
—Sigue investigando.