Las noticias de la solicitud de HF para cambiar a su vocera se extendieron rápidamente por toda la industria.
Mo Ting también escuchó las noticias durante su tiempo de descanso. Para él, si su compañía recibía el trato de portavoz de HF, aún si fuese su modelo más impopular, no se inmutaría. No se inmutó. Pero, para Tangning, significaba que había recuperado con éxito lo que le pertenecía de las manos de Mo Yurou. Entonces, inmediatamente hizo una llamada telefónica a Tangning.
—Bien hecho.
Tangning soltó una suave carcajada y luego respondió con gratitud: —Ser alabada por ti me hace más feliz que cualquier otra cosa.
—Esperaré… a que regreses a tu puesto de número uno.
Esta vez, Tangning simplemente respondió con dos palabras: —¡Lo haré!
Era hora de regresar a Tianyi para enfrentar la fea actitud de Mo Yurou.
En el momento en que se corría la voz, Mo Yurou aún estaba durmiendo dulcemente en la casa de Han Yufan. La noche anterior, ella había escapado del hospital directamente a la casa de Han Yufan, y había usado la culpa para aferrarse a él durante toda la noche, sin permitirle hacer llamadas telefónicas a Tangning. Nadie debería soñar con tomar lo que ella tenía a su alcance… especialmente Tangning, que siempre parecía estar en contra de ella.
Su asistente estaba impaciente y nervioso cuando llegó a la casa. Abrió las noticias para que Mo Yurou las viera y su primera reacción fue de incredulidad: La portavoz de HF ya está decidida, no hay forma de que puedan cambiarlo.
—Yurou, esto es real. El presidente Han recibió una llamada telefónica esta tarde. Ellos le dijeron personalmente que querían cambiar de vocera a Tangning, o si no, preferirían trabajar con otra compañía.
Su asistente señaló las noticias frente a ellos con una expresión urgente y enojada. —¿Qué hizo exactamente Tangning? Si ella quería asegurar un trato, ¿por qué tenía que ser tu trato?
—Regresemos a la oficina. En este incidente, quiero que Yufan me dé una explicación en persona.
Mo Yurou sabía que si ella fuera a discutir el asunto con Han Yufan por teléfono o en casa, de alguna manera saldría del paso diciéndole palabras bonitas. Decidió regresar a la oficina y enfrentar el problema de frente. De esta manera se vería obligado a tratarlo profesionalmente.
Mientras tanto, Han Yufan ya estaba magullado y maltratado. HF estaban absolutamente decidido a cambiar directamente a Mo Yurou por Tangning, pero él sabía que esto perjudicaría enormemente a Mo Yurou. Sin embargo, ¿tenía algún derecho a decir que no? Al final, no iba a ir contra el dinero.
Justo cuando Han Yufan estaba pensando en una forma de consolarla, Mo Yurou, con la ayuda de su asistente, entró a la habitación en una silla de ruedas. Ella llegó justo antes de Tangning, con una diferencia de unos pocos cientos de metros.
—Yufan, ¿qué es todo esto? ¿Cómo podría quitarme Tangning el contrato de portavoz que me pertenecía a mí?
Han Yufan hizo un gesto a su asistente para que saliera de la habitación. Tan pronto como la habitación quedó solo con los dos, Han Yufan se acercó a Mo Yurou y la envolvió en un abrazo.
—Yurou, esto estaba fuera de mi control. Te ayudaré a asegurar un trato aún mejor.
—Sabes tan bien como yo que el señor Eugene es el hermano de la señorita Erin, una de las jueces de Las Diez Mejores Supermodelos. Este contrato era tremendamente importante para mí, y lo peor de todo, ¿cómo has podido dárselo a Tangning?—dijo Mo Yurou. Airadamente empujó a Han Yufan.
Su voz era temblorosa. —Ella ya te robó de mí, ¿no fue suficiente? ¿Por qué tiene que luchar por todo conmigo? No me importa... si pierdo este trato, entonces tampoco quiero a este bebé. No lo haré. Tampoco me quedaré en Tianyi.
—No hables por enojo —dijo Han Yufan, tratando de controlar su temperamento. —¿Cómo puedes renunciar a nuestro hijo tan fácilmente? Sabes que estoy de tu lado, sin embargo, esta vez, HF está completamente decidido...
—Tangning ya se ha rendido tantas veces en el pasado, ¿qué sería una vez más? Está a punto de casarse contigo. ¿Por qué necesita el trato de todos modos?
Después de escuchar el razonamiento de Mo Yurou, Han Yufan sintió que tenía sentido. De acuerdo con la personalidad de Tangning, ella había renunciado a su oportunidad de muchas cosas en el pasado, hacerlo una vez más no le iba a importar. Estaba seguro de que ella estaría de acuerdo, entonces él consoló a Mo Yurou:
—Le hablaré sobre eso. No te enojes, ¿de acuerdo?
Mo Yurou rompió en llanto mientras caía en los brazos de Han Yufan. En este momento, alguien llamó a la puerta: Tangning y Long Jie habían regresado a la oficina.
Mo Yurou inmediatamente contuvo las lágrimas y se distanció de Han Yufan, mirándolo como si estuviera siendo tratada injustamente, hasta que Tangning abrió la puerta y entró en la habitación.
—Tangning, ¿a dónde fuiste anoche? ¿Sabías que te estuve buscando toda la noche?
Han Yufan hizo una pregunta tras otra.
Tangning lo miró a él y luego a Mo Yurou.
—Todo es un malentendido entre Yurou y yo. Ya he lanzado un comunicado para aclararlo todo. No irás a hacer un escándalo, ¿o sí?
Tangning miró hacia otro lado sin decir una palabra. Ella sabía muy bien lo que Han Yufan quería decir con "buscarla toda la noche". Obviamente había estado buscando tanto que terminó buscando en la cama con Mo Yurou. De lo contrario, no había manera de que él no se hubiera dado cuenta de que ya no vivía en la que fue su casa.
—Lástima, el problema con la señorita Mo y yo no es un malentendido...—Tangning habló con calma. —La ayudé muchas veces, sin embargo, ella se dio vuelta y me atacó por la espalda. A tus ojos, ¿soy tan fácil de intimidar?
—Tangning, Yurou estaba preocupada de que hubiera reporteros por ahí, ¡así que eso era lo único que podía hacer!
—¿De verdad? —preguntó Tangning con suspicacia.
—De todos modos, este incidente ha terminado, no hablemos de eso. En cuanto al acuerdo del portavoz de HF ¿qué te parece devolvérselo a Yurou? Este trato es muy importante para ella. En cambio, tú ya te has retirado y no harás ningún desfile, así que ... no sirve de nada ser portavoz —dijo Han Yufan directamente con el tono de un superior obligando a Tangning a devolver el trato a Mo Yurou.
—Exactamente, Tangning, no has hecho un desfile durante tantos años, ni siquiera estás familiarizada con la pasarela... — agregó Mo Yurou.— Además de todo, el trato era originalmente mío de todos modos. HF debe haber pensado que dado que me lesioné, no podría recuperarme a tiempo, y es por eso que te eligieron a ti. No quieres ser una sustituta nuevamente ¿verdad?
—Viniendo de la señorita Mo, estas palabras suenan un poco irónicas —respondió Tangning fríamente, forzando a Han Yufan a responder:
—Tangning, tú no eras así antes. Si aún me amas, no aceptarás este trato. Por el bien del futuro de la compañía, necesitamos que Yurou gane el premio para que podamos elevar la posición de nuestra compañía en la industria.
Las palabras de Han Yufan tenían un tono obviamente amenazante. Había ido tan lejos como para usar el amor como un motivo.
Escuchando hasta este punto, Mo Yurou se estaba riendo por dentro. Sabía que Tangning haría cualquier cosa por Han Yufan, incluyendo renunciar a un trato.
—Yufan, rápido, llama a HF. Hazles saber que Tangning está demasiado ocupada planificando su boda y que no puede aceptar ningún nuevo trabajo...
Han Yufan asintió con la cabeza, buscando el teléfono. Pero, justo cuando la agarró, Tangning lo detuvo:
—El trato... ya lo he aceptado.
—¡Tangning! —exclamó Han Yufan en estado de shock.
Tangning nunca antes había ido en contra de ninguna de sus decisiones.
—No lo olvides, también soy una modelo de Tianyi Entertainment. En realidad, ya he hablado con el fundador de HF, el Sr. Eugene, y está deseoso de trabajar juntos.