—¿Saber qué? —Yin Youyou, rio con frialdad—. ¿Sabes que tu artista está cayendo? ¿O que vas a volver a entrenar a un grupo de novatos otra vez?
Xu Tao miró a Yin Youyou que se estaba burlando de él, pero no estaba enfadado en absoluto. Sólo agitó la cabeza con tristeza.
—Youyou no me importa cómo quieras burlarte de mí. Estoy aquí hoy no por Ning Xi. Es por ti.
—¿Por mí? —Yin Youyou se burló y miró a Xu Tao con incredulidad—. Debería agradecer mucho tu preocupación. Sin embargo, en vez de mí, deberías pensar más en limpiar después el desastre de Ning Xi. No importa lo poderoso que sea Glory World, no hay nada que puedas hacer ahora. Trata de pensar a quién puedes cultivar ahora para no quedarte sin hogar pronto.
Xu Tao era realmente paciente frente a Yin Youyou, que se burlaba de él. Puso una sonrisa amarga.