«¡Maldita sea! ¡Este tipo no se abstiene de los hombres o de las mujeres! ¡Más vale que no le haya gustado mi amor!»
En realidad, había habido un largo período de tiempo en el que ella sospechaba que a él le gustaban los hombres. Después de todo, antes de regresar al país, había aparecido vestida de hombre ante ese tipo. Cuando se disfrazó de hombre durante mucho tiempo, ella misma casi había olvidado su propio género. Recordó que cuando YunShen les había sugerido que empezaran a salir, estaba tan sorprendida que se quedó totalmente perpleja e insistió inmediatamente:
—¡No soy gay!
Más tarde, ella y la Hermana Feng Xiaoxiao, la Tercera Hermana Mayor, discutieron en privado sobre sus sospechas acerca de si realmente le gustaban los hombres muchas veces.Cuando vio la expresión de Ning Xi, el hombre en la cama de enfermos se rio suavemente:
—No te preocupes, no me interesan los hombres.
Ning Xi permaneció alerta.
