Tesorito corrió hacia Ke Mingyu y le miró fijamente.
Ke Mingyu se quedó en silencio.
Mirar fijamente delante de él ya no le satisfacía, así que Tesorito empezó a orbitar a su alrededor, dándole vueltas una y otra vez. Parecía que estaba llevando a cabo una observación científica.
Xiao Tao encontró la situación confusa y divertida al mismo tiempo. Ella dijo: —Parece que le gustas a este chico, maestro Ke. Quiere jugar contigo.
Ke Mingyu extendió sus largos brazos e impidió que Tesorito se tropezase con una pequeña roca. Parecía exhausto. —Está bien.
Qi Fang estaba muy molesto. —Los pájaros de una pluma se juntan. El sentido de la belleza de este chico es igual de retorcido. De todos los chicos y chicas guapas de aquí, ¡fue junto a Ke Mingyu!
Chen Hanchen echó un vistazo al niño y luego volvió a leer su guion.
