Finalmente llegó a su oficina.
¡Bam! Lu Tingxiao abrió la puerta con gran fuerza.
Vio que Ning Xi estaba sentada tranquilamente en el sofá mientras sostenía el grueso álbum de color rojo.
Cuando vio que la chica sostenía el álbum, el habitual comportamiento tranquilo de Lu Tingxi fue reemplazado por una ola de ansiedad, e incluso su voz tembló.
—Ning Xi...
Ning Xi parpadeó, sorprendida por la repentina aparición de Lu Tingxiao, que parecía ansioso y jadeaba con la corbata y el traje un poco desarreglado.
—Uh, jefe…¿Qué… qué le ha pasado?
Lu Tingxiao se dirigió hacia ella, con la mirada fija en el álbum que tenía en la mano.
Ning Xi se disculpó rápidamente. —¡Ah! Yo… Yo lo siento… Yo vi que estaba colocado allí… Y pensé que no debería ser nada confidencial… Así que simplemente lo agarré y miré...
Luego volvió a poner el álbum rápidamente.