Ning Xueluo también habló para convencerla:
—Hermana, sé que no estás a gusto, pero después de todo, realmente fue tu culpa. ¡No puedes arrastrar a la compañía a la ruina por este drama personal entre ustedes dos! ¡La única forma de resolver esto ahora es de minimizando el impacto!
Ning Xi miró a Ning Xueluo, que aparentaba que su preocupación principal era el bien de la empresa, y murmuró: