Tang Lang sintió que algo andaba mal.
—¿Es mi imaginación? ¿Por qué parece que el abuelo adora a Annie? Me estoy volviendo diabético por su dulzura...
—Uhh...
Tang Lang señaló:
—¡Mira, mira eso! ¡Annie casi se cae después del último ataque y el abuelo la ayudó rápidamente! No creas que te moviste lo suficientemente rápido para que no pueda verlo... Ah, Annie cayó en los brazos del abuelo. Dio un paso adelante a propósito... ¡Mira! Le tomó de la mano...
Ning Xi se quedó boquiabierta.
—¡Basta ya! No estamos ciegos.
Todos ellos pudieron ver que Han Xiao estaba siendo inusual hacia Annie. Estaba defendiendo todo el camino como si estuviera tratando a una amante irrazonable...
