—El número de duelos que hemos decidido es de diez, y al vencedor de seis rondas se le dará prioridad en la distribución —dijo Hong Shi—. Han Ling está peleando el décimo asalto.
—Puesto que ha llegado a la décima ronda, significa que las victorias y las derrotas son iguales en ambos bandos. —Escuchando que era el décimo asalto, Zhang Xuan suspiró aliviado.
Después de todo, no tendría sentido continuar la competición después de la sexta ronda, ya que el vencedor ya había sido decidido. Dado que habían llegado a la décima ronda, sólo podía significar que ambos bandos eran iguales.
—Ese no es el caso.
La cara de Hong Shi se enrojeció por la vergüenza—. Hemos peleado diez asaltos, pero hemos perdido en cada uno de ellos, ¡y contra la misma persona!
—¿Perdido contra la misma persona? ¿Quieres decir que la persona en el escenario ya ha peleado diez asaltos, pero aún no ha sido derrotada?
Los ojos de Zhang Xuan se abrieron de par en par.
