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The Frog Demonio

Crónicas Abismales

En la parte norte del mundo, una batalla prolongada entre varias razas y la raza demoníaca finalmente ha llegado a su fin. La Señora de los Demonios, una figura de cabello negro y ojos rojos, gobierna desde su palacio de obsidiana, habiendo derrotado repetidamente a la Diosa, el ser más fuerte del mundo. Sin embargo, se abstiene de matarla, sabiendo que solo renacerá para liderar otro ataque. Mientras la diosa se arrodilla ante ella, gravemente herida e indefensa, los sonidos de explosiones resuenan en el exterior, señalando la inminente victoria de la alianza. A pesar de su inmenso poder, la señora de los demonios reconoce la debilidad general de los demonios en comparación con los humanos y la Alianza. El desarrollo de la energía de combate y el mana ha permitido que los humanos ordinarios luchen contra los demonios, llevando a la derrota del ejército demoníaco. Consciente de la intención de la Alianza de esclavizar al demonio abisal, la Señora de los Demonios decide lanzar un hechizo prohibido que le costará la vida. A medida que las fuerzas de la Alianza asaltan el palacio, dudan al sentir la energía del hechizo. La Señora de los Demonios jura resistir y renacer para salvar a su pueblo. Mientras tanto, la diosa reflexiona sobre el trato pasado de la señora de los demonios hacia ella y reconoce su respeto y dedicación a su pueblo. Mientras la señora de los demonios se prepara para lanzar el hechizo, la diosa pregunta si puede abandonar su plan y vivir libremente. Sin embargo, las señoras de los demonios están obligadas por su deber a restaurar la gloria de la raza demoníaca y proteger a su pueblo. Entendiendo la determinación de la señora de los demonios, la diosa prepara su espada, con la intención de enfrentarse al hechizo prohibido de la señora de los demonios. La explosión resultante crea una nube en forma de hongo, marcando el final del conflicto y el comienzo de una nueva era. La Señora de los Demonios y la Diosa se convierten en figuras históricas, y sus historias son contadas ocasionalmente.
Hail_The_loli · 64.1K Views

La Novia del Demonio

*Novela de Fantasía Histórica de Amor Lento* Elisa estaba a punto de cambiarse el vestido que yacía sobre la esquina de su cama, cuando oyó un golpe suave procedente de su puerta. Curiosa, giró la perilla de la puerta solo para encontrarse con un hombre alto erguido frente a ella. —¡Señor Ian! —lo llamó. Ian sonrió con la acostumbrada sonrisa maliciosa que siempre usaba. Sus ojos carmesíes se pasearon un poco por su habitación y detectaron el vestido negro sobre su cama y luego desviaron la mirada hacia la mujer que tenía delante. Dio un paso adelante y habló. —¿Dónde conseguiste ese vestido? —Me lo dio el Señor Harland —respondió Elisa y estiró su cuello para ver cómo se fruncían las cejas de Ian en su elegancia. —¿Sabes por qué a un hombre le encantaría regalarle un vestido a una mujer? —él planteó el acertijo que siempre la hacía pensar dos veces antes de responder. Pero esta vez, no encontró respuesta y en su lugar negó con la cabeza—. No sé. Su sonrisa se volvió cautivadora, como si algo se hubiera agitado profundamente dentro de los ojos escarlata que tenía. Lentamente deslizó su mano sobre el cuello de su vestido, enviando un escalofrío frío que la sobresaltó por un momento debido a su baja temperatura. Después de desabotonar los primeros dos botones en su cuello, inclinó su cabeza hacia abajo, susurrándole al oído. —Porque desean ser ellos quienes quiten la tela. Hizo una pausa y besó su cuello, tiñendo la piel pálida de rojo antes de retractar su movimiento para fijar su vista en ella y responder con calma. —Desafortunadamente, no puedes ponerte el vestido de allí con esto —se rió entre dientes y le pasó una caja a su mano—. Y la buena noticia es que te he preparado un vestido. Elisa era una niña maldita que podía ver fantasmas. Su familia la odiaba y la lanzaba de una familia adoptiva a otra. Sin embargo, la desgracia no actuaba sola. Cuando la crió su tía, fue vendida como esclava. Cuando pensó que no sería nada más que un sacrificio para el hechicero, fue salvada por un hombre cuya identidad era muy distinta a la de un ser mítico normal. *** Este libro es ORIGINAL y no es una Traducción Únete al discord del Autor: https://discord.gg/YPKueb4
mata0eve · 151.9K Views

The wolf and the gnome

Theron and Kael have been inseparable since childhood—a clever, sarcastic gnome and a confident, troublemaking werewolf prince. Together, they’ve terrorized their teachers, stolen cookies from the palace kitchens, and declared themselves “brothers for life.” But when Theron accidentally discovers he’s Kael’s fated mate, he knows the universe must have made a mistake. Why? Because Kael has spent years describing his dream mate in nauseating detail: “Big-breasted, long-haired, and so hot they’d melt snow just by walking into a room.” Theron stares at his reflection. Flat chest? Check. Short hair? Double check. Definitely not hot enough to melt snow. The Moon Goddess must be having a bad day. His solution? Pretend he doesn’t know. Ignorance is bliss, right? Hide, Gnomes were best at hiding. Except Kael eventually finds out. And chaos ensues. “You’re my mate?” “Uh… no, I’m not. You’ve got the wrong gnome. Goodbye!” Theron yells, making a break for it. Kael isn’t having it. He chases him down like a wolf on a hunt. “You think you can outrun me? You’re like, three .” “Four feet!” Theron snaps, before getting tackled. Now, Theron is stuck with a mate who won’t take no for an answer. “You said you like big-breasted girls! Look at me—I’m a twig!” Kael shrugs, grinning. “I’ve decided I like twigs.” “What about long hair?” “Yours is short, but it’s cute.” Theron throws up his hands. “I’m not sexy!” Kael smirks. “Not yet. But give me some time.”
Maya_J02 · 13K Views

The Warmth of the Sun in the Winter

"They told me the stars could guide me home, but they never said the journey would leave me so utterly lost." Do you still remember your highschool deskmate? The boy with the brightest smile, that girl with the world's most beautiful silhouette? In three years of high school, the shadows of two people intertwine with the chalk, black and white both distinct, drifting around within the memories. The Su Yuanzhou in her memories was an underachiever in high school. He skips class to shoot pool, cheats on his exams and gets into fights. Yet, when she went back to the past she would always surprise herself for seeing a lot of his side, maybe if she did this before he probably wouldn't die. To be able to meet each other on this planet is some kind of fate, and to be able to illuminate our fleeting lives, how fortunate we are. ... Ren Yuxin was trailing behind Su Yuanzhou like a guilty puppy, her face plastered with an exaggerated pout. "Come here," Su Yuanzhou said, stopping in his tracks and turning to look at her. His tone was calm, but the slight twitch in his jaw betrayed his frustration. "Why?" Ren Yuxin asked, her voice overly cautious, taking a step back instead of forward. "Just come here." His patience was running thin. Ren Yuxin crossed her arms and tilted her head dramatically. "No! You’re going to hit me!" Su Yuanzhou froze, staring at her in disbelief. A few students nearby stifled their laughter, pretending not to watch the exchange. "I’m not going to hit you," he said, exasperated. "Do I look like that kind of person?" "Yes." Ren Yuxin nodded solemnly, her eyes wide with mock innocence. Su Yuanzhou sighed, rubbing his temples. How does she manage to drive me insane every single time? His patience—already minimal—was hanging by a thread. "Ren Yuxin," he said, his tone low and dangerous. "Come here. Now." "No way!" she retorted, taking another step back. "I know you’re mad because I—" She paused, looking guilty. "Because you what?" Su Yuanzhou prompted, narrowing his eyes. "... Because I accidentally sent that embarrassing video of you singing in the shower to our group chat," she admitted in a small voice, her eyes darting away. Su Yuanzhou’s face darkened instantly. He felt every shred of his dignity crumbling. "Accidentally?" he repeated, his voice rising. "It really was an accident!" Ren Yuxin protested, raising her hands defensively. "I didn’t mean to press send!" "Accident or not, you’re dead," Su Yuanzhou said, stepping toward her with purpose. "See! You are going to hit me!" she squealed, turning on her heels and running off. "Get back here!" he yelled, chasing after her.
Kissmet · 7.1K Views
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