EL VELO DE LA ROSA
Nadie elige su cuerpo.
Pero él despertó en el peor posible.
Toda la nobleza temía a Anna. Hermosa como una flor envenenada, rica, cruel, arrogante... una joven nacida para pisotear a quienes estaban debajo de ella. Su nombre era un veneno susurrado en los pasillos, una amenaza con rostro de ángel.
Pero un día, Anna cayó... y en su lugar, se alzó alguien más.
Él no sabe quién fue.
Ni su nombre. Ni su origen.
Solo recuerda la soledad.
Un chico silencioso, apartado del mundo, incapaz de confiar en otros, viviendo siempre en los márgenes.
Y ahora, atrapado en el cuerpo de una noble odiada por todos, ese chico sin nombre debe enfrentarse a un destino que no pidió. Nadie lo conoce. Nadie cree en él. Todos lo miran como si aún fuera la misma tirana que hizo llorar, temblar y sangrar a los demás.
Su castigo no es morir, sino vivir... bajo el rostro de Anna.
Pero algo ha cambiado. Hay dudas en las miradas. Vacilaciones en los gestos.
¿Podrá ese alma silenciosa y aislada redimirse en un mundo que ya lo ha condenado?
¿O terminará borrado por completo, consumido por los pecados de un cuerpo que nunca fue suyo?
Entre la fragancia de la rosa y el filo de sus espinas, florece una historia de redención, identidad y cicatrices.