Aun recuerdo aquel día.
En el Clan Raku al cumplir los 15 ciclos se nos consideraba Aspirantes y como en cada equinoccio de primavera allí estábamos todos. Frente al Líder del Clan.
El Bautismo se podría decir que es el evento mas importante en nuestra cultura, nos daba la posibilidad de subir en la jerarquía social de nuestro pueblo y por lo tanto se realizaba en la Aldea principal de nuestro clan.
Estábamos unos 28 Aspirantes alrededor de una gran hoguera, cerca del Bosque de la Depredación. Las sacerdotisas del Templo de la Muerte danzaban alrededor del fuego cubiertas de sangre de cordero. Iban desnudas, todas de grandes pechos y con tatuajes tradicionales en cada rincón de sus cuerpos, cantando alabanzas para alejar a los espíritus malignos.
Frente a nosotros y tras la hoguera, con aspecto amenazante se encontraba el líder del Clan; sentado y bebiendo vino diluido en sangre en un cráneo humano. Imagino que el de algún enemigo vencido antaño. Mientras que tres de sus esposas le masajeaban y alimentaban.
Yulof Raku, nuestro líder. Media mas de dos metros, en nuestro Clan la estatura era grande en promedio debido la selección artificial que hacíamos para producir fuertes cazadores, pero el se salía de la media. Tenia el pelo largo, crespo y oscuro unido a una gran barba que le llegaba por debajo de la clavícula. Complexión fornida, espalda ancha y fuertes brazos. Un hombre muy musculoso para tener 73 ciclos.
Se convirtió en el líder del clan una vez que reto a su bisabuelo y lo mato cercenándole la columna vertebral con su hacha. Su padre no era precisamente el nieto favorito asique nunca conseguiría el poder si no era matando a su ancestro. Tampoco le tenia mucho apego.
Se encontraba pertrechado con un unas telas rojizas de la más alta calidad coronando sobre sus espalda y hombros la piel y cara de un Oso lanudo. El pecho lo tenia descubierto, signo de valentía en nuestro Clan. Con el único trozo de armadura que le protegiese en los antebrazos, unos brazaletes de oro.
En la mano derecha el cráneo y en la izquierda los senos de una de sus esposas que se encontraba sobre el gimiendo extasiada. No perdía el tiempo, la edad le pasaba facturas a todos y el, aún no había decidido quien sería de todos sus hijos o nietos el próximo líder del Clan.
Y en mi opinión cada vez lo tendría más difícil, no paraba de producir descendencia.
Las sacerdotisas pararon la danza y se reunieron alrededor del fuego uniéndose de las manos. Yulof se levantó y camino hacia la hoguera.
— Hoy es un gran día. El Bautismo es el primer paso para convertirse en un gran Cazador y también os dará derecho de tener esposa— Dijo Yulof mientras caminaba en sentido anti horarios alrededor del fuego— Pero no todos podréis. ¿Quién se convertirá en la presa y quien en el depredador? ¿Quién llegara a la cima de su familia? ¿Quién traerá gloria al Clan?.
Una de las sacerdotisas soltó sus manos, se giro y comenzó a mirarnos con los ojos totalmente blancos. Dio un paso y se dirijo hacia Louis Sorit. Le tocó con las dos manos el pecho.
—Aspirante, Louis Sorit. Hoy te has convertido en el Portador de la Marca. Y lo serás hasta que se realice el Conclave de tu promoción. Ahora tienes que elegir, ¿Qué cazareis para convertiros en Cazadores sin Marca?—.
— Un Lobo Alpha del Bosque de la Depredación— dijo Louis Sorit.
Todos los Aspirantes nos miramos, ninguno teníamos idea de nada ni sabíamos que era el cónclave pero si sabíamos que tendríamos que cazar al depredador Ápex del Bosque si queríamos ser cazadores. Podría haber elegido algo más fácil, matar a algo así solo estaba a la mano de cazadores de segunda marca o los mejores de primera. Pero quizás entre los 28 podríamos tener alguna oportunidad, aunque ellos cazan en manada.
— Esta bien — dijo Yulof, tras ello le susurro a uno de sus consejeros "Este año, parece ser que no habrá nuevos cazadores".
—¡Hagan grupos y que comience la caza!— Dijo el consejero que acompañaba a Yulof.
Obedecimos, nuestra supervivencia dependía de ello y nos dirigimos hacia la entrada del bosque de la depredación. Mi familia era de reciente creación asique no teníamos el atractivo suficiente para que alguien quisiera unirse a mi. Sin embargo uno de los Tarak y Louis Sorit acabaron haciendo equipo conmigo.
Hice lo que el Clan me enseño. Comenzamos a rastrear a los Lobos alpha, era complicado, no solían dejar restos de su comida. Y me empezaba a dar miedo convertirme en una.
— ¡Dorian!— Me llamaron.
— ¿Que?— conteste.
— No vayas tan rápido, tenemos que proteger mientas cazamos a Louis. Si lo matan, nunca podremos ser Marcados — dijo Noitra Tarak.
El Abuelo de Noitra era uno de los cinco consejeros debido a que su familia fue una de las 6 que fundaron el Clan. Sin embargo el nunca sería líder de su familia ni consejero, era el séptimo hijo del decimoprimer hijo de su abuelo. Estaba muy lejos en la línea sucesora. Sin embargo tenía asegurado un buen casamiento y una buena vida.
— Tienes razón, "La lanza pide sangre y está impaciente".
— Pues que tenga paciencia, nos dividimos en grupos y sería una desgracia que por nuestra culpa Louis muriera.
— Perdón por llegar tarde, he encontrado heces, puede que estemos cerca— dijo Louis.
— Grandes nuevas— respondimos.
El bosque se torno elevado, y comenzamos a subir por las colinas, teníamos que llegar a la cima lo mas rápido posible, se estaba avecinando la noche, y la noche es peligrosa y sangrienta fuera de la acogedoras murallas de madera que rodeaban las villas del clan. La aldea principal tenia una muralla de piedra, de esta manera el clan quería mostrar poder a otros clanes.
Los "Lobos alpha" tenían la peculiaridad de ser de habitantes de borde en el bosque de la depredación, es decir; aunque sonara contradictorio, mientras mas se acercaran al centro mas a salvo estarían de ellos. La razón de este comportamiento nadie la sabe, aunque el Gran maestro de caza del templo de la bestia presupone que hay alguna bestia de nivel Mega en el centro, pero esta hibernando desde hace cientos de años, por lo cual ni los primeros miembros del clan lo habían visto.
— El sol esta apunto de esconderse — Dijo Noitra, mientras que con los dedos de su mano orientada hacia el horizonte debajo del sol, calculaba el tiempo que les quedaba.
— Paremos y subamos a las ramas de los arboles, con las lianas podemos hacer hamacas y descansar en la copa— dijo Louis.
— Estoy de acuerdo, yo montare guardia durante el primer turno — dijo Noitra.
La noche cayo y ninguno pudimos conciliar el sueño, el silencio mortal del bosque nos mantenía alerta. Y aprovechamos para conocernos mejor.
— Entonces piensas que nunca llegaras a ser el líder de tu familia, eso no es necesariamente cierto, si consigues llegar al rango de Maestro de Caza, el Lider del clan podría darte un permiso para crear la tuya. Siendo realistas estas muy lejos de la linea sucesoria — Dijo Louis.
— Exactamente, pero seria una Familia de Caza, no una de consejo por lo tanto nunca podría ser consejero — dijo Noitra.
— ¿Para que quieres tanta responsabilidad? Además llegar a tal rango no es facil, en la Aldea principal hay pocos y de miembros del clan que vivan en las villas aun ninguno lo ha logrado, antes les llega la muerte. Si yo fuera tu no haría nada, estas en buena posición, con el entrenamiento que te ofrece tu familia seguramente llegues a Cazador de segunda marca de forma garantizada y con algo de talento a tercera marca. En cambio nosotros ,suerte tendremos si llegamos a cazador de primera marca.— dije.
— Silencio— Dijo Noitra. Mientras que nos indicaba que mirásemos a la lejanía por el camino donde habíamos venido.
Risas y chasquidos sonaban, alrededor de varias luces sombras se amontonaban. Venían en nuestra dirección, pronto pudimos escuchar sus conversaciones.
"Carne, sangre y tripas para el dios de la sangre" Repetían continuamente. Las sombras se tornaron visibles cuando la distancia se acorto. Eran salvajes antropófagos. Humanos que se dedicaban a cazar a otros humanos y a comerse su carne en sus fiestas paganas llenas de depravación.
— ¿Qué coño hacen aquí? Se suelen asentar al noroeste del bosque, no se meten en territorio Raku ya que suelen atacar a las villas del clan Ammu o de otros clanes menores por todo el norte— Dijo Noitra.
— Pues parece que el Jefe de este clan de salvajes a decido entrar en nuestro territorio — dije.
— ¿Qué hacemos? — dijo Louis.