Capítulo 1
La humanidad vive aislada del mundo exterior, encerrada en una ciudad protegida por un domo de aire. Esta barrera es su única defensa contra la lluvia zombi y el aire zombi, términos con los que ahora se conocen dos fenómenos letales. La lluvia zombi es una precipitación interminable que convierte en zombis a quienes beban su agua o cualquier líquido contaminado con ella. El aire zombi, por otro lado, transforma en zombis a quienes lo respiren.
En este mundo vive Abel, un caballero mágico del aire. Su trabajo es patrullar las calles de la ciudad durante la noche y, durante el día, relevar a uno de los magos de aire que mantienen el domo en funcionamiento. Este ciclo es la única forma de garantizar la supervivencia ante los eventos que tomaron a la humanidad por sorpresa.
Ahora, la civilización depende de los magos para generar agua potable, de los caballeros para mantener el orden y de los alquimistas, quienes buscan la piedra filosofal con la esperanza de deshacer la lluvia y el aire zombi, salvar al mundo y recuperar sus vidas.
Abel solía preguntarse qué fue lo que originó la lluvia zombi y el aire zombi. Hasta aquel día en que la encontró.