Dos días pasaron en un abrir y cerrar de ojos, y ahora es el día en que Alpha Derrick y Mona se comprometerán oficialmente.
Me he encerrado en mi habitación durante este tiempo. La única persona que me visitó fue el Señor Jethro. No he visto a nadie más en los últimos dos días, probablemente porque todos están ocupados con los preparativos del compromiso. Luna Catalina ha estado demasiado ocupada como para pelear conmigo, lo cual fue un alivio.
A las ocho de la mañana, ya podía oír voces provenientes del salón. Las risas y el parloteo eran fuertes, señalando que la reunión había comenzado. Mi estómago se revolvió. El día que más temía había llegado, y no podía librarme de la inquietud que crecía dentro de mí.
Por un breve momento, pensé en huir. ¿Podría escapar? Pero lo deseché. No, no podía irme así como así. Aunque mis nervios no se calmaban.