Unas horas antes del juego de secuestro, Kent se había quedado inconsciente después de que la Santa de la Lanza le diera una paliza.
Aunque él no lo llamaba una paliza, sino más bien un duelo en el que perdió. Al final, se desmayó y tuvo que pasar 10 horas en la tierra de los sueños, sin saber nada de las travesuras que sus dos Jinetes Nocturnos estaban haciendo.
Pero cuando se despertó, vio el mensaje de que su trabajo estaba bien hecho. Sin embargo, su maestro estaba allí limpiando su cuerpo, así que solo pudo sonreír y esperar a que ella se fuera.
Después de pasar un poco más de tiempo con él, ella efectivamente se fue para el duelo de Unity mientras él esperaba a que Ingrid volviera para que pudieran ir juntos. Necesitaba una excusa para entrar, e Ingrid era la mejor persona para llevarlo.
