—Entonces ahora tengo la Esencia de Sangre y el Sendero del Vacío que Ingrid podría recorrer si de alguna manera logra despertar la línea de sangre de los Vacíos —dijo Kent, mirando la caja de jade en su mano izquierda y el manual de cubierta oscura en su derecha.
Luego procedió a recuperar otro ítem, que era la historia de los Vacíos que había recibido en una de las cuatro misiones.
—Todos son para Ingrid, quien, según Gaia, posee los Ojos del Vacío que solo pertenecían a una raza que se extinguió hace muchos años atrás. Los Vacíos —ahora, tenía una esencia de sangre de esa raza y un camino que ella podría seguir si se convirtiera en una Vacía.