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—¿Cómo te fue? —preguntó la maestra Mara en el momento en que Kent apareció afuera. Ya habían pasado dos días, y como había prometido, ella lo esperó hasta que salió.
—Bien —respondió Kent—. Aunque no pude alcanzar la iluminación como esperaba, obtuve algo mucho más valioso.
—Eso es bueno entonces... Supongo que no desperdiciaste tu oportunidad allí, como la mayoría lo hace —dijo ella.
—También lo creo —replicó Kent. No estaba seguro si debía hablarle sobre su avance en el jardín.
El descubrimiento de que podía usar su intención de espada con qi para ataques activos no era algo completamente nuevo, pero quizás la forma en que lo entendió era algo que muchos valorarían.
Observó su expresión, intentando ver si estaba curiosa sobre su avance, pero no vio nada de eso. Al final, Kent decidió guardar el asunto para sí mismo y seguir adelante.
