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Park ya no sabía cuánto tiempo llevaba en la mazmorra.
Días. Semanas. Quizás meses. (No que tuviera un calendario, duh).
Lo único que sabía era que seguía siendo un slime débil.
Claro, había logrado comer cientos de insectos, gusanos y otros seres que harían vomitar a cualquier humano normal. Había crecido un poco, su gelatina era un poquito más resistente (ahora los bichos no lo mataban de un solo golpe), y tenía habilidades…
Habilidades de slime inútiles:
Absorción Lenta (LV4) (come cosas con menos sufrimiento.)
Camuflaje Débil (LV2) (es menos brillante, wow.)
Resistencia al Veneno Débil (LV1) (puede lamer veneno sin morirse… casi.)
—… Esto es una basura —se quejó mientras flotaba en el lodo.
Era patético. Un monstruo sin futuro.
Hasta que el Sistema habló.
[Notificación del Sistema]
Condición especial detectada: "Supervivencia Extrema"
Has desbloqueado la habilidad única: Asimilación (LV1)
Park se quedó en silencio.
—¿Asimilación?
[Explicación del Sistema]
Habilidad: Asimilación (LV1)
Permite absorber completamente la biología y habilidades de lo que devoras. Sin embargo, solo puedes retener un número limitado de habilidades. Ciertas condiciones pueden desbloquear evoluciones avanzadas.
[Notificación del Sistema]
Si completas el 100% de los atributos de la raza slime, podrás evolucionar en humano.
Silencio.
Luego, risa.
Una risa enfermiza, desequilibrada.
—¡¿Eso significa que puedo dejar de ser un maldito slime si como lo suficiente?!
Su baba tembló de emoción.
Tenía una oportunidad. Pequeña, ridícula, llena de sufrimiento, pero era una oportunidad.
Park no era idiota (bueno, tal vez un poco). Sabía que si lograba convertirse en humano, seguiría siendo débil. Pero comparado con un slime… ¡sería un dios!
Tenía que hacerlo.
Y eso significaba comer más.
Mucho más.
Pero para eso…
—… Necesito pelear con algo que no sean insectos.
Giró su único ojo viscoso hacia la criatura más cercana: una rata demoníaca que rondaba por la cueva.
No era gigante, no tenía colmillos enormes ni garras mágicas. Solo una rata normal, un poco más fea de lo habitual.
Pero para Park…
Era su primer rival real.
Y hoy, iba a pelear.
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Capítulo 4 Fin.
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