-Queridos hijos, saben cuánto los amo y cuánto quiero verlos crecer. Este es el día más difícil de una madre, el día que sabe que va a morir por darles vida. Mi corazón está con ustedes y mis entrañas. -la madre de Horacio y Tairrael exclama llorando.

-El médico me comentó que mis dos niños nacerían pegados y yo moriré en parte, su Padre tiene miedo. -la madre de Horacio y Tairrael exclama llorando

-Como madre siento que algo los acecha pero ¿que es? Espero solo sea un procedimiento rápido y pueda protegerlos -la madre de Horacio y Tairrael exclama llorando.

-reciendo la anestesia, y despertando-

Vi como un médico con bisturí en mano aparece con un bebé, dos bebés unidos, me asusté porque me dijo que era imposible separarlos, quiero que se quieran como hermanos no que sean uno para toda la vida.

la madre cae desmayada y despierta aturdida

Él médico me va a llevar con ustedes dos bebés para saber si es posible separarlos. Me dijeron que solo será posible si un milagro los tiene vivos, porque están malditos a estar unidos a un corazon y un pulmon, una aberracion de cuatro piernas, cuatro brazos, dos cabezas, dos penes y tan solo un corazon y un pulmon para cada uno.

ocho años después.

Mis chiquillos, discriminados por sus compañeros de colegios fueron arrojados por las escaleras y los van a operar, ojalá algo divino los proteja.

al día siguiente

Sus hijos están bien y pudimos separarlos, cada uno tiene su cuerpo y sus pieles ya no están unidas, pero cuando los trate de pequeños se veía más difícil es como si algo los estuviese separando - dice el médico intrigado.

Cómo la madre de hijos siameses sufriendo y viendo esto, ojalá ese niño se muera por arrojarlos -exclamo la madre

Listo sus hijos, ya pueden salir- dice el médico y ve a dos niños caminar con dificultades.

Madre estoy feliz de que puedan hacerlo, mañana no los enviaré al colegio- dijo la madre.

al día siguiente comenzó la guerra, cayendo una bomba en el colegio y los alrededores

Hijos míos él ejército viene, su padre está arriesgándose, debajo de la cama, rapido - dice la madre calmado a Horacio y Tairrael mientras escuchan tiroteos que perforan las paredes y caen cerca de la cama y mesas.

No toquen a mis hijos a penas caminan y son siameses, los separaron ayer -dice el padre y los soldados lo encadenan y se lo llevan.

Los soldados irrumpen la casa, sacan a la madre de la casa, sacan a Tairrael, sacan a Horacio.

Tairrael se levanta y pelea como si no estuviese enfermo pero se veía horrible.

Horacio intenta ser diplomático y solo habla.

Yo me llevaría a este se ve más sano para la guerra - dice el soldado mientras se llevan a Horacio.

Tairrael intenta pelear y lo impactan con un arma, dejándolo inconsciente y la madre lo cuido.

Hijo, cuídate y cuida de tu padre- dice la madre.

El destino cayó en este cuerpo y quiénes nos rodeen están malditos menos nosotros -dice Tairrael dormido.

La madre suelta una lágrima.

Y no vuelven a ver a Horacio y llega la noticia de la muerte de su padre en guerra.

- Hijo, Tairrael no odies a los débiles por buscar fuerza, odia a los fuertes por nacer -dice la madre.

Seré un buen maestro, les enseñaré lo que es la vida y estudiaré para ello, veré a mi hermano cuando cumpla los diecisiete -dice Tairrael con odio en los ojos.