Un día soleado y despejado, o una noche de lluvia, son cosas que hacen que la gente sienta emociones efímeras acorde al momento. Sin embargo, a mí me importaba una mierda. Eso pensaba mientras jugaba, hundido en el sofá, con los ojos medio cerrados y las manos aferradas al control.

{¿Otra vida? Ja. Alguna vez creí que podía tener una, como los demás. Pero la respuesta fue un rechazo tan profundo que aún lo recuerdo vívidamente. No importa lo que haga, no importa cuánto lo intente, al final siempre termino en el fracaso.}

En la pantalla del televisor, de repente, se iluminó en rojo con las palabras: **GAME OVER**. Solté el control y me recosté, mirando al techo con una mezcla de fastidio y resignación.

{¿Esfuerzos? ¿Para qué? No tengo un motivo, ni un objetivo. Solo estoy aquí, matando el tiempo como siempre.}

De repente, mis pensamientos fueron interrumpidos por algo más que la pantalla del televisor. En mi mente resonó una voz fría y mecánica.

[Prueba que eres digno de sobrevivir. Elige la dificultad: **Fácil**, **Normal**, **Difícil**, **Infernal**, **Trascendental**.]

- ¿Qué mierda es esto? ¿Me estoy volviendo loco o qué? {O eso pensé. Pero lo volví a pensar, y seguí pensando. Al final, llegué a la conclusión de que, en realidad, nunca me esforcé en nada.}

Aquella ventana frente a mí, que aunque pensé que la había imaginado, una idea llegó a mi cabeza.

{Ya lo he intentado todo. Entonces, ¿por qué no morir con dignidad?}

- Al diablo. Si voy a morir, que sea de una vez.

Y, sin dudarlo, presioné la dificultad **Trascendental**.

En cuanto lo hice, todo a mi alrededor se volvió oscuro. No podía ver, oler o sentir algo. Estaba completamente sumido en la nada. Sin embargo, en medio de esa oscuridad, escuché una voz que decía:

[Has entrado en la Torre. Dificultad seleccionada: **Trascendental**. Empezando tutorial.]

{¿La Torre? ¿Trascendental? Esto tiene que ser una broma pesada.}

A pesar de que aquel vacío era tan relajante que parecía que hubiera muerto, de repente sentí algo similar a una descarga eléctrica por todo mi cuerpo. Al principio fue débil, incluso agradable, pero gradualmente comenzó a aumentar al punto de que comencé a gritar de dolor.

- Ah, mierda... esto duele... {Suspiro.} ¿En serio tengo que pasar por esto?

{Solo tengo que esforzarme una vez. Solo por esta vez.}

Y aunque no podía ver nada, me forcé a abrir los ojos. A pesar de que no había diferencia, en vez de forzar mi cuerpo contra el dolor, intenté relajarme, ya que parecía que así dolería menos.

- Relájate, idiota. Relájate... {Aunque dudaba de esta decisión, al final fue la mejor idea que tuve, ya que el dolor, tal como había aparecido, comenzó a desaparecer lentamente.}

Sin embargo, comencé a sentir una energía a mi alrededor. Era similar a estar en el océano, repleto de agua, de la cual, aunque es agradable, no podía estar mucho tiempo. Similar a ahogarme, sentí como todo mi cuerpo se comenzaba a llenar de esa energía.

{¿En serio? ¿Ahora me voy a ahogar en mi propia miseria? Qué sorpresa.}

Y aunque pensé que iba a morir por un momento, repentinamente se detuvo. Aquel espacio oscuro en el que estuve desapareció, y en su lugar me encontré en una habitación en blanco.

- ¿Otra habitación? ¿No podían ponerme en una playa o algo así?

Aquella voz que escuché antes volvió a hablar.

[Primera etapa del tutorial completada. Iniciando la segunda etapa.]

Y de repente, en mi mente surgió el conocimiento de muchas armas, las cuales no había visto o incluso imaginado.

{¿Armas? ¿En serio? ¿Ahora soy un maldito armero?}

Aunque a pesar de eso, en última instancia, me llegó la información de lo que tenía que hacer. Y sin pensarlo mucho, elegí la guadaña corta.

- Bueno, al menos es fácil de manejar. No quiero cansarme demasiado.

De repente, una guadaña pequeña con un mango no más grande que mi antebrazo surgió de la nada. Y el espacio en blanco en el que estaba desapareció para dejarme de nuevo en mi departamento.

Ahí, un temblor surgió tan fuerte que pensé que el edificio iba a colapsar.

- Ah, genial... ¿ahora un terremoto? Esto es demasiado esfuerzo para un solo día.

Y aunque se había detenido aquel temblor, todavía estaba un poco en shock en el suelo. Pero no había tiempo para eso. Aquella ventana volvió a aparecer, pero esta vez decía:

[Segunda etapa del tutorial: **Caza a 10 ogros**.]

- ¿Ogros? ¿En serio? ¿No podían ser ratas o algo más fácil? {Suspiro.} Bueno, supongo que no tengo opción.

Afuera del edificio se escuchaba mucho ruido. Al asomarme por la ventana, vi cómo de algo así como fisuras en el aire salían monstruos. Parecían ogros y duendes, e incluso pude percatarme de cómo salían de otras fisuras monstruos como dragones. También vi cómo la policía intentó detenerlos con sus armas, pero no funcionaban. Los monstruos comenzaron a masacrar a los humanos.

{A mí la verdad no me importaba. Al final, todos los humanos son iguales que yo, simplemente que no lo quieren aceptar. Nadie se quiere sacrificar por una persona que no conoce.}

Sin perder el tiempo, fui a completar mi misión, que era matar a diez ogros. Y ya que esa guadaña no me iba a ayudar de mucho, fui a coger cuchillos de la cocina y un arma que tenía, la cual conseguí luego de terminar un servicio militar. Al final, lo que pensé es que solo estaba acumulando polvo en mi armario.

{Así que, bueno, al menos servirá para algo.}

Pero pensé que estaba olvidando algo, y eso fue una buena música para acompañar el momento. Agarré unos audífonos y me los puse, junto a la música *World's End Dancehall*.

- Esto le dará un toque épico a la masacre.

Así comencé a bajar las escaleras. Y a pesar de mi baja resistencia por no hacer mucha actividad física, estaba menos cansado de lo que pensé al bajar esas escaleras.

Cuando estuve en el primer piso, vi cómo unos duendes se acercaban. Ellos al parecer disfrutaban de esa matanza, ya que sonreían cada vez que mataban a un humano. Y no era caso contrario: se me estaban acercando.

{Estas mierdecillas se me intentaron acercar.}

Con unos cuantos cuchillos y el escudo, lancé el primer cuchillo al primero, tacleé al segundo para rematarlo dándole una patada en la nuca, y al tercero lo insulté:

- ¿Qué carajos se creen, hijos de puta?

Pero al voltear, vi cómo un ogro se abalanzó con su masa y me golpeó en el costado, rompiéndome un poco las costillas. Escupí un poco de sangre y dije:

- Ya veo por qué eran tan arrogantes, bastardos.

Sin embargo, sin darle tiempo a un segundo golpe, le quité el seguro al arma y le disparé en los ojos. Cayó al piso en seco.

- Uno menos. Faltan nueve.

Fui hacia otro ogro que intentaba matar a unas personas que escapaban hacia el estacionamiento. En mi mente pensé:

{Será más fácil matarlo, ya que está distraído.}

Me acerqué por detrás y les corté los tendones de las piernas. Aunque solo pude lograrlo con uno, el otro se giró rápidamente y me lanzó una patada. Aun así, dejé clavado mi cuchillo en su pierna. Sin perder el tiempo, me volví a poner en pie y le disparé hacia los ojos.

- Esto es mucho más difícil de lo que pensé.

Mientras jadeaba en el suelo, tumbado, pensé:

{Es muy difícil para mí mantenerme en pie.}

Revisé el cargador para luego levantarme, aunque con dificultad y jadeando. Vi a mi siguiente víctima: un ogro que estaba moribundo en el suelo. Al parecer, los policías lo lograron dejar en ese estado. Aprovechando esa kill gratis, lo asesiné.

- Cuatro menos. Faltan seis.

Unos ogros estaban enfrentándose a un tanque militar, el cual les estaba causando bastantes daños. Aunque el tanque tampoco estaba ileso, logró matar a dos ogros. Pero otros tres aparecieron y comenzaron a destruirlo, asesinando a los tripulantes.

Yo aproveché y le disparé a uno de ellos en el ojo. A causa de que estaban lejos, no pude darle bien, y el tiro fue al hombro, lo que hizo que se percatara de mí y comenzaran a perseguirme. Sin embargo, me había anticipado un poco a eso y seguí disparando hasta que logré derribar a uno.

Pero me había quedado sin munición. Aún faltaban dos más que me estaban siguiendo. Al final, tuve que huir hacia el estacionamiento.

Allí vi cómo muchas personas se estaban escondiendo. Ya que fue mi culpa que los ogros fueran para allá, les dije que corrieran. Sin embargo, estaban demasiado aterrorizados.

Yo, sin perder el tiempo, fui a buscar mi coche. Cuando los ogros llegaron, estaban masacrando a la gente del estacionamiento. Pero sin perder el tiempo, los atropellé con mi carro y con la guadaña corta los terminé de asesinar.

Aunque uno logró saltar al auto para luego propinarme un garrotazo desde arriba, rompiendo el techo del auto. Salí rápidamente de ahí, y el ogro siguió persiguiéndome.

Corrí tan rápido como pude, pero estaba a punto de alcanzarme. Sin embargo, tuve una idea. Al girar a la derecha, encontré un extintor contra incendios y saqué rápidamente la hacha que había ahí.

Cuando el ogro pasó corriendo, le clavé el hacha en la rodilla, lo cual lo hizo caer al piso. Sin perder el tiempo, con mi guadaña lo asesiné.

En mi mente pensé:

{Faltan tres.}

Cogí mi guadaña y la hacha contra incendios y fui a buscar a mis últimas tres víctimas. Para mi suerte, había bastante ogros que habían sido derribados por los militares que estaban en la zona, ya que estos habían comenzado a suprimir a los monstruos. Rematé dos que encontré moribundos.

- Ya falta solo uno.

Pensé que iba a ser fácil, pero de repente el dragón que había visto antes comenzó a escupir fuego por toda la carretera. No tuve más remedio que esconderme dentro de un edificio.

Ahí estaban los duendes, preparados para una emboscada. Uno de ellos me agarró la pierna y otro me apuñaló el brazo. Pero, ya que estaban heridos, con el hacha le clavé la cabeza a uno y con la guadaña degollé al otro.

Al final, volví a mi apartamento muy herido, sin haber podido terminar la misión. Usando vendajes, me suturé las heridas y me tomé algo con las pastillas para el dolor.

Aunque fue por un momento, me puse a pensar en lo ridículo de esta situación mientras me reía a todo pulmón. Pero luego de un tiempo, me di cuenta de que todo era real.

Sin perder tiempo, fui con el hacha y la guadaña a terminar la misión. Cuando estoy en la primera planta nuevamente, vi cómo la gente corría y detrás de ellos, alrededor de 20 o 30 ogros. No podía contar con el pánico y también comencé a correr con ellos.

Pero sin perder la idea de que solo faltaba asesinar uno de ellos para completar mi misión, y bajo la idea de que cada misión lleva una recompensa, esperaba que mi recompensa valiera la pena.

Me detuve un instante para posicionarme e intentar lanzar el hacha contra uno de aquellos ogros. Cuando logré lanzársela, asesiné a uno de ellos con un corte de la hacha en el cuello.

La misión se completó, y la voz del sistema dijo:

[Misión completada. Preparando para la segunda misión.]

De repente, todo a mi alrededor se volvió oscuro, y en un parpadeo estaba en la habitación en blanco. Mis heridas y mi cansancio se habían recuperado. Un contador sobre mí apareció:

[Tiempo para la siguiente misión: 30 minutos.]

Otra información fue insertada en mi cabeza: un sistema donde había niveles y que no podía recibir la experiencia del tutorial sino hasta que terminara el mismo.

Así que me quedé acostado en el piso, procesando todo lo que había pasado. Y como un reflejo involuntario, o una acción sin pensar me reí.

-KHAJAJAJAJAJAJAjajajaaa...

-¡¡¡QUE MIERDA ESTA PASANDO!!!