Chereads / Sin Dios / Chapter 4 - Capítulo 4: Anaka se vuelve amiga.

Chapter 4 - Capítulo 4: Anaka se vuelve amiga.

Al día siguiente luego del incidente con Anaka, mientras Exequiel caminaba para ir a estudiar se encontró con Anaka, la cual al notar que el estaba ahí, se movió a otra parte asustada, viendo esto, Exequiel se dio cuenta que su plan funcionó, al Anaka tener al Ángel de la Memoria, puede recordar todo en su línea temporal, aunque Exequiel vuelva en el tiempo, entonces recuerda cómo murió y el dolor que le causaron las heridas.

-Oh, buen día Anaka, ¿Cómo te encuentras?, tu eres amiga de Mía ¿verdad?- Dijo Exequiel fingiendo no saber nada de lo ocurrido.

-Ho… Hola, B… Buen día, si soy amiga de Mía- Contestó Anaka con miedo.

-Estoy segura de que lo que vi era real, no puede ser coincidencia que este tipo aparezca aquí- Pensó Anaka.

-Escucha Anaka, me gustaría hablar contigo luego de clases, puedes ¿Verdad?- Sugirió Exequiel, con un tono un poco agresivo.

-C… Claro que puedo, lo esp… p… esperare en la salida- Respondió Anaka, aún con miedo.

-¡Genial! Te esperaré- Dijo Exequiel y se despidió.

Durante clases, Anaka se notaba distraída y preocupada, esto era porque, al volver en el tiempo y tener al Ángel de la Memoria en su poder, recordaba la anterior línea temporal, así el estrés la dejo traumada, sumandole su muerte le dejó un gran trauma, mientras estaba perdida en mitad de la clase, su compañera le avisó a su profesora la cual le permitió ir al baño a refrescarse y si se sentía mal, podía ir a la enfermería. Estando en el baño se refresco un poco, pero al voltearse a ver de donde se escuchó un sonido, Exequiel apareció ahí.

-¿¡Que mierda haces aquí!? Es el baño de mujeres, encima de la secundaria, tu vas a la universidad- Dijo sorprendida Anaka.

-Era muy posible que intentaras escapar, entonces vine hasta aquí, también estaba seguro de que estarías aquí- Respondió con calma Exequiel.

-Pero eso no quita el hecho de que estés en el baño de mujeres de una secundaria- Continuaba diciendo Anaka.

-No vengo con ninguna otra intención más que hablar contigo, es más, si me llegaran a ver, tengo un plan para salir de aquí- Comentó Exequiel.

-No confío para nada en tí- Dijo Anaka.

-Esta bien, no confíes en mí, lo único que quiero decirte es que eso no fue ninguna alucinación ni nada, todo lo que viste fue real- Comentó Exequiel, con seguridad.

-¿De que estas…?- Estaba por preguntar Anaka, sin embargo se quedó sin palabras.

-Mierda, ésto es peligroso, osea que toda esa tortura fue real, pero ¿Como?, si sigo viva, sin heridas- Se preguntó Anaka a sí misma en su mente.

El ambiente se puso tenso y silencioso, hasta que se escuchó el sonido de la puerta.

-¡Mierda!, a la salida te explicare todo- Dijo nervioso Exequiel.

Luego de decir eso sacó su pistola y se disparó para volver al pasado, al haber vuelto en el tiempo, Anaka seguía sin entender, Exequiel se disparó a sí mismo y ahora estaba nuevamente en clases, esta pidió ir al baño para refrescarse un poco, pero en realidad quería ver si Exequiel volvía pero no, luego recordó que le dijo que a la salida le explicaría todo, por lo cual volvió a clases e intentó estar tranquila, sin embargo era imposible, no podía creer todo lo que estaba pasando, quién era Exequiel, porque recordaba algo que no pasó y cosas asi.

Ya en la salida, Exequiel esperó en frente de la puerta hasta que salieran Anaka y Mía, cuando salieron, Exequiel empezó a explicar todo, con Mía al lado.

-Muy bien Anaka, ahora sí te explicaré todo, pero antes tengo una pregunta… ¿Por qué intentaste matar a Mía?- Preguntó Exequiel.

-Supongo que todo lo que vi fue real, entonces el hecho de que intente asesinar a Mía también, ayer no lo hice porque al ver todo eso, pensé que era algo como una premonición de lo que pasaría si lo hacía, supongo que en cierta parte sería verdad y en otra no, pero fuera de eso, intente matarla por esto, tu crees que somos amigas, pero ella solo esta conmigo por un reto de sus amigas, y cuando no estoy yo, se burlan de mí, al enterarme de esto intente suicidarme, pero ahí apareció un especie de angel, que me dio un poder y una segunda oportunidad, entonces pense en asesinarlas a todas y modofocarles la memoria a todos sus conocidos para que no recuerden haber conocido a esas chicas, sin embargo viniste tu y arruinaste todo, no se como lo hiciste ni que fue lo que pasó allí, solo se que no era normal, así que quiero que me expliques- Contó Anaka, con frustración.

Para este momento, Mía no comprendía nada, estaba en un punto medio entre miedo, enojo, tristeza, sorpresa y muchas emociones, pero ninguna era positiva.

-Entiendo, no creo que haya sido una buena idea lo que hiciste, no solo por el hecho de asesinar gente, si no por otro- Dijo Exequiel.

-Mira, yo tambien tengo uno de esos poderes, que en realidad se llaman Bendiciones y Maldiciones, la bendiciones, son como la que tienes tu, un poder otorgado por un ángel, que se puede usar casi indefinidamente y luego están las maldiciones, como la que tengo yo, las maldiciones son otorgadas por demonios y solo las puedes usar al morir, las maldiciones son mucho más fuertes que las bendiciones, pero el costo es muy alto, se que te estarás preguntando el porque me dispare allí en el baño, pues mi demonio es Zornanír, El Demonio del Tiempo, su habilidad es llevarme a el momento que quiera dentro de mi línea temporal, pero yo descubrí que al morir, puedo usarlo para llevar mi cuerpo y alma a el momento que yo quiera, entonces soy relativamente inmortal, porque al morir, solo vuelvo en el tiempo y puedo revivir- Explicó Exequiel.

-Voy comprendiendo, pero ¿No es demasiado doloroso morir y morir y morir?, aparte… ¿Usaste ese poder durante ese juego de la pistola?- Preguntó Anaka.

-Las dos preguntas las respondo con un sí, sobre si me duele hacer esto, ya no tanto, en un principio me resultaba muy difícil el hecho de tener que suicidarme, pero ya lo hice tantas veces que es basicamente indoloro, y sobre que hice en el juego, tambien use mi maldición, tenía una jeringa que al pincharme muero al instante, es la inyección letal que se usaba cuando existía la pena de muerte, casa vez que notaba que algo andaba mal me pinchaba e intentaba ver que hacias, entonces, cuando llego mi turno decidi no jugar más y matarte de la forma mas dolorosa que pude, luego me suicide y decidi volver en el tiempo porque a diferencia de ti, yo no puedo borrar la memoria de la gente y hacer que te olviden, entonces sería malo que la gente hable de una niña asesinada y con signos de tortura, aparte aproveche que tu bendición te permite recordar pasivamente todo lo que viviste, incluso lineas temporales que ya no existen, para dejarte ese trauma como un aviso- Continúo explicando Exequiel.

-Ya entendí todo, menos una cosa, ¿Qué quieres?- Dijo Anaka.

-Quiero tu poder, sé que no te lo puedo arrebatar, pero si usarte a ti con tu poder, entonces quiero pedirte que te me unas, porque es seguro que haya más gente con estos poderes y que no sean beneficiosos tanto para ti como para mi, ¿Qué opinas?- Pidió Exequiel.

Luego de discutirlo unos minutos y que Anaka aceptará la petición, Exequiel volvió a dispararse para volver en el tiempo y que Mía nunca haya escuchado eso, la razón por la cual dejó a Mía escuchar todo eso fue para ver la reacción de las personas normales al escuchar sobre los poderes, y no fue una reacción positiva, por lo cual tendrían que tener cuidado y que nadie se entere de eso.

Luego de regresar al pasado, llevó a Mía a casa de Frans, luego fue a su casa y contactó a Anaka para contarle sobre que debían mantener en secreto los poderes, luego se recostó y se durmió sin más.