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Chapter 6 - Capitulo 006 - Amegakure

[ Konan POV ]

En una silencio qué ya estaba acostumbrada, estando a un costado de Nagato siempre en lo que el me necesite, apretando suavemente mis manos por ver como su cabello debajo del rojizo ya se encontraban unas hebras en blanco, escondiendo la debilidad de forzar sus ojos.

A pesar de que la muerte de Yahiko sucedió ya muchos años, aun me sigo lamentando todo lo que tuvo que sufrir Nagato, solo para salvar mi debilidad por dejarme atrapar por Hanzo.

Y ahora, Nagato, que siempre fue el chico tímido y amable de nuestra organización, se convirtió en un ser frívolo e intimidante, controlando el cadáver de Yahiko con el poder del Rinnegan.

Yo... Solo debo obedecer.

Atendiendo el cuerpo principal ya que Nagato tenia la mayoria conectada a tubos que le daban el suplemento necesario, vi como Nagato tensaba su rostro.

" ¿sucedió algo? " pregunte con suavidad, al notar como dirigia la mirada a un punto muerto escondido de la cueva.

" si.. sentí una forma de chakra muy grande junto a un deseo interminable de sangre, pero parece que tiene otra... son dos personas, puede ser muy peligroso, esta a la costa de Amegakure que une a Kusagakure, tienes que dirigir te y hechar un vistazo " frunci el ceño al escuchar las palabras de Nagato, aunque ahora solo asentí.

No desobedeceria las ordenes qué me dió

" volveré en cuanto confirme las identidades, no tardare " aunque me dijera eso Nagato, yo evaluaria al qué podría ser dos enemigos formidables.

Desapareci lentamente por mi ninjutsu de papel, mientras cuerpo se transformo en mariposas de origami, flotando intermidablemente en busca de los chakras, pero ahora estando mas cercana a la costa qué me mencionó Nagato, aprecié qué efectivamente, en lo que era una de las cabañas destruidas sentia una fuerte opresión brotando del lugar, este sentimiento... no era chakra.

Era algo más oscuro y siniestro, como si me sintiera observada por un ser peor que la muerte misma, este sentimiento como si estuviera apunto de morir a manos de alguien.

Colocando mi mirada algo abrumada de mi rostro a medio formar, me acerque con cautela apareciendo mi cuerpo directo en el suelo, el cual ya se estaba formando con rapidez juntando todo el origami, formando shuriken de origami alrededor de mi cuerpo, lista para atacar en cualquier momento, al acercarme suavemente a la estancia, note algo que me sorprendió

Crei que miraría a un ser maligno rebosante de esa energía siniestra e intimidante, tal vez a un gran hombre sediento de guerra.

Pero...

¿Porque hay dos niños desmayados aquí?

Mi mirada apreció tanto a una niña, la cual parecia mas grande, realmente no me preocupa, pero al mirar a ese niño...

Toda la sinergia maligna qué sentia y aumentaba mis sentidos de supervivencia provenian de ese pequeño niño que esta desmayado frente mío, torci mi boca preocupada de ello, porque aunque el chakra abundante de ambos, el niño es el unico que me hace sentirme amenazada

" esta sensación tan opresiva, es la primera vez que me encuentro con esta... es parecida a un... " tratando de pensar, realmente no sabría como tomarlo, ya que los unicos que se sienten de esta manera, lo unico que me viene a mi mente es lo que Nagato describió a los jinchūrikis, mis ojos miraron desconcertada al niño desmayado.

Al acercarme ha ambos, aprecié qué la niña estaba herida " es posible que huyeran... " es lo unico que podia pensar, la niña estaba lastimada de sus pies recorriendo a sus piernas, pero al ver al niño, este estaba ileso.

A pesar de esa sensación, mire ha ambos niños con lástima, realmente odiaba ver como los niños tendrían que huir por la crueldad humana.

Muy pronto, comenzaremos con el plan, para que ningun inocente sufra lo que nosotros sufrimos.

Con suavidad, varios origamis de mi cuerpo se trasladaron ha ambos niños, tendré que esconderlos por si ambos escaparon de algún lado, resguardar los para protegerlos.

Encontré una cueva cercana en la aldea, por lo cual traslade a los niños en ese lugar, este lugar remoto ayudaría a obstruir a los ninjas de percepción, tienen que ser muy buenos para poder encontrarlos, con calma deje ha ambos niños y me acerque al único que estaba lastimado, sin mostrar un gesto en mi rostro estoico mientras vendada con suavidad a esa niña.

Ahora, los dejaría descansar en ese lugar, antes de salir, mi mirada ambar nuevamente se detuvo en ese niño que tenia un gesto apacible, no parecía estar sufriendo, aunque emitia constantemente una sensacion extraña -que claramente no veía- parece que el niño esta teniendo una buena siesta.

¿Que estara soñando...?

Negue con mi cabeza suavemente para volver a la base donde se encontraba el cuerpo principal de Nagato.

Ese niño, tenia demasiado potencial, podría ser un Jinchūriki por el mal constante qué transmite a mi cuerpo, pero realmente...

Deseo que no lo sea, si eso sucede, significa que esta destinado a morir a manos del Gēdo Mazo a través del ritual de integración.

Llegue a la base donde me encontré con Nagato, verlo con seriedad me hizo comenzar hablar.

" solo eran dos niños... calculo que tienen entre ocho años y cuatro años, se ven muy delgados y ambos... también poseen cabello rojo " susurre suavemente, notando una mirada sorprendida de Nagato.

Esto también me hizo pensar que esos niños podrían ser parientes lejanos de Nagato, más al notar como Nagato se habia tensado

" ¿donde están en este momento? "

" parecen qué estaban huyendo, el mayor de los dos tenia herida en sus pies y un corte profundo en uno, es posible que escaparan de Kusagakure al encontrarlos cercanos a la frontera de estos " hable con calma expresando mi punto de vista, notando como Nagato pensaba en ello.

"... dales un lugar donde establecerse dentro de Amegakure "

Escuchar su voz me hizo solo dar una leve reverencia con mi cabeza, acatando su orden, aunque Nagato no lo dijera, yo iba actuar también para darles un lugar donde vivir en la aldea de la lluvia, después de todo, ellos solo son victimas de la última guerra qué tuvimos.

" por cierto, ¿descubriste ese chakra maligno? ¿De cuál de los dos era? " ver la mirada insistente de Nagato me hizo detenerme en mi caminar

" yo... realmente no creo que sea Chakra, se sentia algo más profundo, el chakra de ese niño es abundante, pero no maligna " recuerdo esa sensacion, estremeciendome aunque no perceptible a la vista " se sentia más oscuro, como si fuese una persona que ha matado durante tanto tiempo, una sensacion sadista... el niño más pequeño es lo que me dio de esa sensación, pero confirmo, posiblemente sea el aura que recorre en el, no parece que sea una amenaza " conteste aun bastante tranquila, notando el pensativo modo de Nagato.

" qué extraño... ¿haz notado una técnica de sellado en su vientre? " parece que el también pensó el hecho de que podría ser un Jinchūriki reciente.

" por ahora no he notado nada " negue con firmeza, solo apreciando el asentir de Nagato, dándome el vistazo para que fuera de nuevo con esos niños.

Hasta ahora tampoco tenemos noticias de un bullicio de las grandes aldeas qué hayan perdido un Jinchūriki, por lo cual también nego la existencia de ese pequeño como vasija.

Pero entonces, ¿que podría ser esa sensacion opresiva qué sale del cuerpo del niño?

No tengo respuesta a mis dudas, cuando menos me lo espere, de nuevo habia llegado al lugar donde se encontraban ambos niños, no tomo mucho tiempo el que hice de regresar, cuando ingrese, allí mire al niño que me daba esa inquietud despierto.

A comparación de encontrarme con una mirada muerta como pensaba, ese niño aunque tiene ojos maduros, el fugaz brillo de inocencia aun estaban en esos ojos algo carmines, pero para sorpresa mía, la opresión e intimidación qué me daba ese niño desapareció como si se hubiera esfumado.

" ¿quien es usted? ¿Usted nos trajo a este lugar? " la voz del niño era llena de dudas y nervios, realmente si nunca hubiera sentido esa inquietud, pensaría qué el niño solo esta asustado, sin embargo, esta siendo cauteloso.

" no debes de sentir miedo, pequeño " fue lo que dije, acercándome a ese niño, sin querer, imagine a un Nagato en su imagen, ya que ese niño tiene algo que Nagato ha perdido mucho tiempo.

Esa luz...

La sensación que me daba ese niño, maligna y malvada inquietud, desapareció cuando me dedico una sonrisa tan alumbran te qué hasta mi mirada estoico fue desapareciendo lentamente, dedicando una sonrisa con suavidad y tristeza, tan cálida como el rocío de la mañana.

Ese niño me brindaba una paz exuberante.

Y ahora, realmente la imagen de un niño sanguinario y peligroso fue torciendose a una iluminada.

Saliendo de esa cueva, yo les prometí alojamiento en Amegakure, sosteniendo la mano del niño para guiarlo en una casa abandonada en la aldea. Viendo la determinación del pequeño cuando le dije que aun estaba débil, en ese mismo momento, ahora en vez de apreciar a Nagato en sus facciones.

Solo pude recordar al único que mi corazón lloraba todas las noches, Yahiko.

Ese niño tenia una determinación inquebrantable, queriendo hacerse fuerte, por lo que noté.

Y ahora, llegamos en lo que es la nueva morada de esos hermanos.

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Al momento de ingresar, Yūji se mostro interesado, en todo el camino noto como esa aldea no dejaba de llover, las calles mayormente estaban desérticas, y cada persona que salia del lugar notaba a Konan qué le miraban con agradecimiento y alegria, a pesar de ver en parte la deprimida aldea, es lo unico que encontró en emoción.

" llegamos, este será el lugar donde se quedarán " el pelirrojo escuchó la voz de la mujer elegante, Yūji se metió en el lugar bastante alegre de apreciar, aunque se notaba polvoriento y en algunos lugares despintados, era más grande que su antiguo hogar.

" es muy espacioso, ¡me gusta! " hablo con alegría el niño para correr a su alrededor, mirando feliz a la mayor del lugar, sonriendo enormemente.

Konan volvio a querer fingir su rostro serio, pero su expresión suavizado delataba sus pensamientos

" si, espero se logren adaptar y no les moleste la lluvia en la aldea, puede parecer una aldea pesimistas, pero mantienen su calidez ahora que logramos darles comida y agua, así yo también les daré una ración de comida y agua para que puedan crecer bien " sin duda Konan lo decía con sinceridad, después de todo, ese es el unico propósito de Akatsuki original, que ella aun mantiene y que Nagato conocia, pero no la detenía.

Aunque Akatsuki cambio su objetivo inicial y se disperso la mayoria, ella seguia ayudando a los necesitados, por lo que ayudará a esos dos niños huérfanos.

Yūji se sincero con esa mujer, mostrando una gratitud enorme junto a una sonrisa suave " muchas gracias, hermana Konan, eres realmente una buena persona.

Ahora Konan, ya no quiso esconder su sonrisa, solo se la ofreció al pequeño " vendré en un momento para traerte la ración de comida y agua para un mes, por ello momento, descansen aquí y establezcan bien "

Para sorpresa del pequeño pelirrojo, miro como Konan desaparecia en hermosos origamis de mariposas, haciendo que se sienta entusiasmado de aprender ninjutsu, aunque como dijo la hermana Konan, aun era muy pequeño y debil, su cuerpo no ha tenido ningún entrenamiento.

" tengo que hacerme fuerte, parece ser como dijo Gojo-sensei, este lugar puede ser peor que lo que era Japón con la pelea de las maldiciones " susurro para si mismo el niño ahora quedándose solo junto a su hermana, quien se notaba puntos de despertar, en lo que dedujo la estancia de ellos en la cueva, parece que pasaron la noche en ese lugar, aun era temprano en ese día.

Yūji miro curioso a su hermana, en espera de que despertara, él porque la esperaba era para poder explicar todo lo que ha pasado, que aunque no era mucho, el ayudaría a disipar las dudas de su hermana.

" mmh... ¿ah? " Karin fruncia su entrecejo, que cuando fue despertando lentamente, miro a su alrededor, ella solo había colapsado en el bosque, pero ahora vio un techo, ni siquiera tuvo tiempo de apreciar su entorno ya que creía que los ninjas de hierba los habian atrapado y de nuevo estaban encarcelados en Kusagakure.

Agitada se levantó lista para enfrentarse, pero lo que vio la desconcertó, no estaba encadenada, no habia ninjas, y su pequeño hermano estaba sentado en el piso mirándola con curiosidad qué rapidamente cambio en una alegria notoria

" ¿Yūji? ¿En donde estamos? " pregunto desconcertada la niña, realmente confundida de porque el entorno habia cambiado

Yūji se levantó pasando le esos lentes de montura negra qué siempre utilizaba su hermana " han sucedido unas cosas hermana, ¡pero ahora todo esta bien! Esos ninjas malos no nos van a encontrar " hablo con firmeza pero aun alegria el pequeño niño, aunque Karin desconcertada.

" ya veo... ¿puedes explicarme qué sucedió? No llegue para esconderte si quiera, colapse " Karin realmente estaba avergonzada por su triste condicion, esta vez colapso sin siquiera resguardar a su hermano menor.

Pero vio como Yūji negaba con una sonrisa " no te preocupes, hermana, cuando tu caíste, te cargue y nos lleve directo a un lugar donde resguardar nos, pero me quede dormido y desperté en un lugar oscuro, nos encontró una hermana muy bonita y ella te curo la herida qué tienes en tu muslo, yo te protegi por si era mala persona, pero resulta que no fue asi, y ella ahora nos trajo en Amegakure, dijo que nos daria raciones para todo un mes y se acaba de ir en este mismo momento " hablo con rapidez que apenas Karin podia procesar la información que estaba llegando a su mente, parpadeando incredulo a todo lo que su hermano menor le estaba diciendo.

" ¿estas seguro que no nos secuestraron? " ella tenía algo de pavor, su madre les dijo que todos los ninjas serán hostiles con ellos, todas las personas los odiarian o los utilizarian para sus propios beneficios.

" no hermana, te estoy diciendo la verdad, ¡porque no me crees! " Yūji se quejo sacudiendo un poco el brazo de Karin, aunque se sorprendió cuando estaba misma la abrazo con fuerza, sus pequeños ojos la miraron con curiosidad, al menos su largo cabello rojizo.

" tonto... que hermano tan tonto tengo, tu tenias que haberte protegido, ¿que hubiera pasado si fuera una persona mala? ¡tendrías que haber huido y abandonar me! No me perdonaría si algo te sucediera " la voz de Karin era temblorosa, haciendo que Yūji realmente se sorprendiera, sentir el amor fraternal, uno que no había sentido tanto tiempo, le hizo apretar su garganta, como decía esas palabras tan duras sobre si misma de dejarla y huir como un cobarde.

Sus ojos se estrecharon para corresponder ese abrazo con suavidad de su hermana " nunca te abandonaría, siempre estaré para protegerte, pase lo que pase... eres, lo unico que tengo " ahora no hablo la nueva alma, Yūji lo dijo con seriedad y una voz solemne, ya que solo afirmaba el hecho de que en esta vida, lo unico que tenia para sentirse bien y seguro siempre será su hermana.

Karin con sus ojos humedecidos solo estos mismos se estrecharon, sintiendo como una gota broto de su lagrimal, la sonrisa plasmada en su cara " y por eso digo que eres un tonto sin remedio, pensando en mi antes que en ti... " no negaría qué se sentia conmovida por tales palabras de su hermano " se supone que quien tiene que protegerte soy yo, no tu " se limpio suavemente sus ojos para separarse de su hermano, aun dandole una sonrisa " pero no hablemos de esto, lo importante es que no era una mala persona, y es tan buena qué nos brindó donde quedarnos.

Yūji solo le dedico una sonrisa con suavidad, afirmando lo que decía su hermana.

" bueno... ahora, ¿dices que estamos en la aldea de la lluvia? " le pregunto Karin calmando sus sentimientos, viendo lo efusivo qué volvio a ser el pequeño pelirrojo

" así es hermana, pero por ahora descansa, estas muy lastimada, yo te ayudare a limpiar este nuevo hogar " hablo con firmeza el pequeño niño, aunque parecia algo gracioso ya que su voz chillona y estatura pequeña no lo hacia verse intimidante, Karin solo sonrio divertida

" si, pequeño jefe, esta bien, obedecere tus ordenes " hablo en calma la chica, viendo como Yūji se moviliza, por parte de Karin, ella volvio a recostarse suavemente para ver sus heridas vendados, realmente no creía que podría moverse en unos días al menos hasta que cerrará bien.

Con ello, pasamos al pequeño pelirrojo, aunque dijo que ayudaría a limpiar, también llego en un punto lejos de su hermana para sentarse.

' tengo que hablar directamente con Sukuna, si esta ligada a mi alma, entonces ajustare cuentas con ese maldito ' pensó el niño, aunque se pusiera la fachada dura, realmente sentia algo de miedo profundo en su ser, después de todo, ese hombre mató a todos sus seres queridos, pero tenia que ser fuerte para poder sobrevivir en el que ahora era su mundo, junto a su hermana.

Cerrando sus ojos, ahora de embarcó en el interior de su alma, lentamente se fue oscureciendo todo a su alrededor para notar el interior, aunque su alma era como un lugar lleno de luz y de vida, mas profundo y lejano, se encontraba un espacio contaminado, la sangre vibrante y espesa, con ese olor fétido y nauseabundo de muerte y alaridos desgarradores, vio que en su espacio del alma, el realmente se miraba a como murió en su vida pasada.

Con confianza, y un mirar firme, paso de su espacio del alma qué era el cielo mismo a ese lugar de muerte desgarrador, sus pasos hacian ecos como si pisara agua salpicando, lo unico que se escuchaban eran los ecos del lugar.

algunas veces escuchaba el recuerdo de esa sangre, como la gente gritaba y suplicaba, después de todo, eran años y años de sufrimiento qué causó Sukuna.

Al llegar a la profundidad, vio la caracteristica área de donde Sukuna siempre estaban, una pila de cráneos humanos qué lentamente hacian una montaña, vio el caracteristico trono del rey de las maldiciones, atras de esa colina enorme de craneos, estaban las puertas Torii, demostrando el templo sagrado de Sukuna, noté como ahora se mostraba extasiado, cinismo en sus ojos junto a sus cuatro brazos característicos, ya no se parecia a Yūji

Ahora realmente estaba en su forma completa.

" finalmente despertaron tu subconsciente, ¡por fin! Ahora con esto, todo mi poder vuelve a estar en mi ¡Jaja! " se rió con fuerza el hombre que se notaba ahora corpulento y mas alto, Yūji era inmutable a sus risas cínicas y muy sonoras, esas carcajadas fuertes.

" no me importa si obtienes todo tu poder, porque así como tu lo obtienes, yo también lo hago... ¿no te haz dado cuenta de algo, Sukuna? " hablo con una calma escalofriante qué hizo al rey de las maldiciones, de un salto llego al suelo repleto de sangre qué reflejaba sus propios cuerpos.

" estoy seguro que sigues siendo la vasija perfecta para que yo vuelva, mocoso " hablo con confianza la maldicion, tan alto que cubria con su sombra al ahora pelirrojo, Sukuna lo miro con desdén " puedes haber reencarnado de nuevo en Japón, pero aun tienes mi alma en ti, lo que me da posibilidades de volver a la vida y plagar de muertes y hermosos cánticos desgarradores de la gente " cada palabra que brotaba de Sukuna, sus cuatro ojos se abrieron, junto con esa sonrisa escalofriante implantado en su rostro

Pero Yūji seguia sin cambiar su gesto firme.

" estas equivocado Sukuna, tu alma, ahora es también parte de mi alma, nunca podrás volver a poseer mi cuerpo... porque ya no estamos en Japón, ni el mundo qué habías conocido " aquello qué dijo Yūji hizo que en un gruñido, el pelirrosa colocará su mano en el cuello del mocoso.

Alzando a Yūji, en una posición qué se logra apreciar el coraje de Sukuna, este mismo apretó con fuerza esa parte prominente.

" estas mintiendo, mocoso, pero igual, te haz puesto en el lugar para que yo mate tu alma, y poseer tu cuerpo, se una buena vasija y muere tan miserable como antes " Yūji se temía qué de nuevo Sukuna volveria a pelear con el. Y tenia razon, Sukuna mostro una sonrisa sangrienta, ya que estaba planeando a usar su técnica maldita favorita, desmantelar.

Yūji estaba algo tenso, preparandose para pelear, pero antes de hacer algo, sintio como en su espacio espiritualidad, también podia movilizar su chakra, aunque no tenia mucho conocimiento sobre esta energia, era mucho más puro que lo que él conoce como CE, Sukuna se sorprendio, antes de hacer su característico movimiento, detrás de Yūji salieron cuatro cadenas gruesas, estas emitian un vibrante color dorado, hasta unas luces vibrantes qué contrastaban con el lugar lúgubre.

" ¿que mierda es esto? ¿Una técnica innata? " hablo Sukuna sintiendo qué esas cadenas lo inmovilizaron, evitando qué hiciera uso de su poder, pero lo más sorprendente de eso, hizo que se diera cuenta del algo " es-esta... maldita mierda, esta tomando mi energia maldita " bramo con furia el rey de las maldiciones, con un gesto iracundo hacia Yūji

" esto no es una técnica innata, no es como piensas... " realmente Yūji también estaba sorprendido de poder pensar en manifestar esas cadenas a voluntad, recuerda que las había manifestado en un momento de rabia, pero parece que estar usándolos, consume bastante de lo que tiene conocimiento como Chakra, Yūji vio como Sukuna aunque queria liberarse, las cadenas se apretaban más y más, todo para que estuviera sin ningún medio de escapar.

" ya no puedes hacer nada Sukuna, lo que es tu alma, tu poder, todo de tí, ahora me pertenece " fue serio en su habla, su gesto muerto hacia al qué alguna vez fue la maldicion más poderosa conocida.

" Tú... " escucho la rabia acumulada en ese gruñido qué broto por el esfuerzo, Sukuna no podia moverse por más que quisiera.

" si no me creés, todavía puedo sentir piedad sobre tí, te dejaré mirar a mi lado, como lo hacías antes, después de todo, yo soy tu, y tu eres yo, de ahora en adelante, cada alma mía qué reencarne y transmigre de cuerpo en cuerpo, tu también lo harás " hablaba firmemente el chico, viendo como Sukuna detenía sus movimientos.

La maldicion solo se quedo quieto en su lugar, escuchando atentamente cada palabra, aunque su gesto enfadado seguia visible.

Tiene que aceptar el hecho que realmente ese mocoso lo atrapó.

Pero no se dará por vencido, en un momento de debilidad, en un momento sin retorno, sabra qué Yūji siempre acudirá a el, y él, reclamara su cuerpo una vez más.

Sukuna miro a Yūji con burla " mocoso, aceptaré tu término, pero si logro ver el medio de escapar, lo tomaré, y te haré ver el sufrimiento de primera mano, veras a tus conocidos, a tus amigos, a todos los que amas... volver a sufrir en mis manos, y yo me reiré de tus desgracias, sere la pesadilla qué nunca dejara de ver la oportunidad de mirarte sufrir " con ello, Sukuna aceptó lo que dijo Yūji, dejando en claro sus evidencias.

Yūji sabia que lo que decía era verdad, es por eso, que tiene que hacerse fuerte pase lo que pase.

Porque no volverá a suceder una segunda vez nunca más.