Mientas Josef respondía las preguntas de kira, Rimiu puso el desayuno en la mesa y se sentaba en la silla escuchando la conversación con una sonrisa.
Después de escuchar sobre las peculiaridad de su padre, Kira tampoco se sintió muy decepcionado ya que si el quirk de su padre hubiera sido poderoso, seguramente se hubiera convertido en héroe en vez de trabajar como las personas comunes.
Kira miro a su madre sentada a su lado con los mismos ojos que les envió a su padre anteriormente con muchas expectación en sus ojos como el mar.
"Jeje" Rimiu se rio del entusiasmo de su hijo y le sacudió su peinado suavemente.
"Esta bien, mi peculiaridad no es de combate ni nada muy útil en la mayoría de casos normalmente, pero en caso extremo puede ser muy útil, básicamente, mi quirk es una regeneración bastante fuerte comparados otros quirks del mismo tipo. Y antes de que preguntes el porque no me he convertido en un héroe o algo por el estilo, es básicamente por las debilidades que trae la regeneración a mi cuerpo, como lo son la falta de fuerza física que puede gastar toda mi energía en unos pocos minutos, pero esa no es la verdadera debilidad del quirk de regeneración, la debilidad más fatal es el dolor al regenerarse a uno mismo, y aunque intente de muchas formas de superar el dolor, es extremadamente difícil y muy muy doloroso" explicó Rimiu sobre su quirk, en la parte en que llegó al dolor, se estremeció levemente al recordar el gran dolor, solo cerro los ojos y sacudió la cabeza para dispersar ese sentimiento.
Kira se sintió un poco mal por hacer recordar a su madre recuerdos doloroso, y su expresión se atenuó en gran medida,
Rimiu noto esto y rápidamente acarició el cabello de kira con suavidad, peinándolo hacia un lado con una sonrisa cálida en sus hermoso labios, consolando a su hijo para que no apague esa llama de curiosidad en su corazón.
"Cariño, no hay que preocuparse por mi, aunque mi quirk es bastante doloroso, también es un salvavidas para mi, incluso si me dieran otra opcion para tener otro quirk, seguramente no lo remplazaría por nada en el mundo" Consoló suavemente Rimiu con una voz maternal.
Al escuchar las palabras consoladoras de su madre, Kira se animó en gran medida y su rara sonrisa se amplió un poco más que antes.
"Ahora tienes que comer tu desayuno antes de que se enfríe por completo" dijo Rimiu con la voz y mirada un poco más severas.
Kira no dudó y asintió, cogió el cubierto al lado del plato y empezó a comer a grandes bocados su desayuno.
Rimiu y Josef se miraron durante un segundo en donde se sonrieron sin decirse nada entre sí, se conocían desde hace muchos años, y se entendían a la perfección sin abrir la boca.
...
-3 meses después-
Habían pasado tres meses desde lo sucedido con kira, durante este tiempo a sido muy tranquilo en la vida de la familia de 3.
Kira desde ese día en que supo que podía tener una peculiaridad, intento muchos métodos para saber cuál era su don, sin embargo, para su mala suerte, no tuvo ningún resultado de ninguna forma.
Estuvo desanimado por un tiempo, y no fue hasta que sus padres le convencieron de que su quirk aparecía a la edad de los 4 años, y ahora que tenía 3, sería muy abrupto si apareciera su quirk tan temprano.
Hoy era sábado, un día extremadamente soleado, en el cielo no se observaba ninguna nube a simple vista.
Kira y Rimiu caminaban con las manos pegadas entre sí en la calle transitada por innumerables civiles de muy diferentes apariencias. Las peculiaridad a hecho que la apariencia de muchas personas se extremadamente diversas, algunos tenían la apariencia de pez, otras de lagartos, y muchos tenían cuerpos normales como lo de una persona normal pero con partes de algún animal como lo son una orejas de zorro o cola de gato.
La mirada de Kira era como la de un bebé curioso, mirando su alrededor como si fuera la primera vez que lo veía, y de hecho era la primera vez que veía a muchas personas juntas con diferentes apariencia.
Como él mismo era una persona a la que no le interesaba jugar con los niños de su misma edad, tampoco tuvo mucha interacción con muchas personas, así que naturalmente, se sorprendió mucho al ver diferentes apariencias de muchas otras personas, si no fuera porque es un poco retraído, seguramente se abalanzaría sobre otras personas para preguntarles sobre sus peculiaridades.
Y también porque su madre lo llevaba de la mano para que no se perdiera ante la inmensa cantidad de personas en las calles. Se dirigían al centro comercial para comprar algunas necesidades que se habían agotado tras mucho tiempo de uso.
Afortunadamente, su casa no estaba muy lejos del centro comercial, solamente a unos 700 a 800 metros de distancia, por lo que se ahorraron el viaje en tren, solo tenían que caminar por unos pocos minutos para llegar a las puertas del centro comercial.
...
En otro lugar, encima de un gran edificio que no estaba muy lejos del centro comercial, estaban tres figuras de diferentes alturas de una de la otra.
El hombre alto medía 1,90 metros de alto y era extremadamente musculoso, con un rostro anguloso y una cicatriz en la ceja derecha. Su pelo es corto y oscuro, con una ligera barba descuidada. Sus ojos siempre parecen evaluar a los demás con desdén. Lleva una chaqueta de cuero negra, jeans oscuros y botas pesadas. Sus nudillos tenían uno guantes negros como la tinta.
Al mirar su apariencia, se puede concluir que su fuerza no era pequeña en absoluto y su aura intimidante haría que los niños se mearan en los pantalones y llorarán.
Por otro lado, el de en medio tenía la estatura de 1,70 era de complexión más delgada y un poco menos musculosa, con el cuello grueso y una mandíbula cuadrada. Su nariz parece haber sido rota más de una vez. Lleva el mismo tipo de chaqueta de cuero negra, pero la suya está un poco más gastada. Sus jeans tienen algunos remiendos, y lleva unos guantes sin dedos. Tiene el ceño permanentemente fruncido.
Aunque su aura era bastante menos intimidadora que la de su compañero más alto, lo que lo conocían su personalidad, dirían que es mucho peor que el grandullón, también se puede observar que las yemas de sus dedos eran de un color rojo sangre.
Y por último pero menos importante, el más pequeño de los 3.
Media 1,50 metros tenía músculos marcados bajo su ropa ajustada. Tiene la cara afilada, con una cicatriz en el pómulo y unos ojos oscuros llenos de locura y sed de sangre. Su cabello es corto y peinado hacia atrás con gel. Viste la misma chaqueta de cuero negra que sus compañeros, aunque en su caso parece un poco grande para él. Usa jeans ajustados y zapatillas deportivas. Es el primero en saltar a la pelea, incluso cuando no es necesario, y siempre está buscando demostrar que es más temible de lo que su altura sugiere.
Y lo más sorprendente era que este enano era el líder de este grupo, su quirk era lo suficientemente poderoso como para hacer que sus dos compañeros obedecieran sus ordenes a pesar de ser más alto que él mismo.
Su quirk consistía en tener la habilidad de lanzar cristales a grande velocidades, pero eso no es todo, lo que lo hace más poderoso y aterrador es que los cristales tienen la habilidad de cancelar los quirk siempre y cuando atraviesen el cuerpo. Esta peculiaridad hizo que muchas personas murieran en sus manos y otras muchas le tuvieran miedo.
"Naoki, ¿ya te encargaste de las bombas en los lugares en que te pedi?" dijo el más bajo con un tono autoritario, su voz era una chillona pero con tono que solo puede tener quien se haya manchado las manos de sangre.
Naoki no se atrevió a descuidar la orden de su jefe y rápidamente asintió con la cabeza en confirmación.
"Jefe, use mi don en el 90% del centro comercial, dentro de 1 hora, puedo detonarlos en cualquier momento dentro de un kilómetro de donde puso la bomba" dijo Naoki en un tono respetuoso.
"Bien, bien, jajajaja, esos héroe fastidiaron mi plan hace una semana para conseguir 30 millones de yenes, ahora me toca a mi devolverles el favor con las vidas de las personas a las que protegen" dijo el enano con una gran sonrisa que casi le partía la cara, sus ojos mostraban una gran locura abrumadora que hacía que los dos presentes se estremecieran por la intención asesina del enano.
"Esperamos unos 5 minutos más, dejaremos que estas pequeñas moscas disfruten sus últimos minutos de vida" dijo el enano mientra sus ojos locos miraban hacia abajo donde estaban las personas caminando por la calle como si fueran simples hormigas.