-Bienvenidas a la maquina de rebobinación... o al menos así le digo yo. Como Railed Island está cayendo lentamente, la única manera de poder salir de esta, es que ustedes vayan por diferentes realidades usando este control especial que fabriqué por si las dudas y OJO AHÍ, solo usenlo cuando sea necesario. Por lo que he visto el espacio tiempo también se está rompiendo así que haganlo rápido, viajar entre realidades hará que puedan alterar el tiempo y así hacer que todo esté caos se solucione o que nunca ocurra. El tiempo es una ruleta rusa, pero yo estaré aquí vigilando que todo vaya acorde al plan oara que puedan salvar a Railed Island, ustedes eligen. En fin, usen el control con precaución, una sobrecarga que sufra este y se pueden quedar atrapadas en alguna realidad distinta a la nuestra para SIEMPRE.
-Con qué viajar entre realidades uh..?? -digo intrigada Francine.
-Pero... ¿Y si se produce alguna paradoja en el tiempo y todo se va al carajo o... sucede algo y el futuro se verá afectado? -preguntó Grace.
-Tranquilas, solo usen el control con cuidado y no para juegos, todo esto es serio. Ah, y no le digan a nadie sobre esto porque es un secreto entre yo y ustedes, *guiño*
-No creo que quieras ir a una aventura con ese estupendo y largo cabello blanco, ¿no chiquita?
Se escuchó una voz masculina proveniente de una de las salas. Dicha voz comenzó acercandose hasta que se mostró desde las sombras. "Hola" fué lo que dijo.
-Uhh... ¿Kiky quien es el chico que está allá?
-Oh, se me olvidó presentarlo. Es el Jeff, mi hijo.
-¿¿QUEEE?? -exclamaron ambas chicas sorprendidas.
-Jajaja, creo que te olvidaste que estoy en mis 50's, Fran Fran.
Jeff, el hijo de Kiky se presentó con una actitud positiva y a la vez presumido. Vestía de unas gafas redondas, una chaqueta de cuero y un cabello oscuro y atractivo. Este entró a la habitación fijándose en Grace, con quien le tiraba una mirada bastante coqueta.
-H-hola, soy Gra...ce -dijo ella presentándose bastante nerviosa y sonrojada, nunca había visto a un hombre tan atractivo en años.
-Hola chiquita, veo que estás temblando, ¿quieres que te preste mi chaqueta de cuero, Bon Bon? Que hermosa cabellera llevas, pero... no creo que quieras ir a una batalla así, yo digo que te lo cortes, más comodo. Además, me gustan las de cabello corto... si...
-¿C-cortarmelo? Mmm... ¿Ah? ¿J-Jeff que... ha-ces? Ah... ¡Oye! Ya basta, no soy una chica fácil de conseguir, tengo mi moral y me la vas a respetar. Además, tengo otros asuntos que resolver.
-Ey chiquita, no hago nada, solo estoy... viendote más de cerca. Ven sígueme, te mostraré algo que te encantará blancanieve.
"Wow" dijeron Kiky y Francine viendo la situación, pero mejor siguieron en el tema principal.
-Nunca supe que estabas casada, ¿y tu esposo? ¿Se encuentra aquí también?
-Quien, ¿Philler? Naaah, el y yo estamos divorciados desde hace 15 años. Al principio me afectó pero ya no, puedo vivir sola.
*Suspiro* -Como estará Kraken, me preocupa el hecho de que esté bajo las garrar de mi padre y de Vanessa.
Huscky miró con un rostro preocupado y de compasión, así que fué a su escritorio y sacó algo para entregárselo.
-Toma Fran, te doy este collar. Este collar era mio desde que fuí adolescente, me lo dió mi padre y significa mucho para mí. Quiero que lo tengas, el futuro de la isla depende de tí.
-¿Tu collar? ¿En serio? Kiky, no... no creo poder aceptarlo...
-Hazlo Francine, tenlo -dijo Kiky con una sonrisa en el rostro.
Francine recibió el collar y se lo puso en el cuello, también con una sonrisa en el rostro.
Huscky fué a preparar la maquina de rebobinación para el gran viaje por mientras.
En eso, llega Jeff con Grace detrás, ella estaba totalmente loca y perdida en Jeff, venía con la ropa algo desordenada mientras Jeff estaba más contento que nunca. Aunque Grace venía con algo nuevo, se cortó su frondosa y característica cabellera, ahora tiene un cabello corto similar al de Francine, pero sin dejar de lado ese curioso color blanco.
-Jeff eres... wow me sorprendiste, apesar de ser alguien difícil de conseguir... creo que me conseguiste de algún modo.
-Bueno chiquita, espero que te vaya bien en el viaje con la amiga de mi mamá, quiero verte aquí cuando llegues... y haré algunas cosas contigo para celebrarlo ¿que te parece?
-Pero por supuesto, llegaré aquí sana y salva, está en mi código de heroina.
*Clap* *Clap* -Bien bien bien, maquina encendida. ¿Están listas? Solo coloquense en la "X" qué está marcada en el suelo. Una vez estén listas, presionen el botón rojo de su control.
Grace y Francine caminaron lentamente hacia la "X". Durante unos segundos, ambas se miraron mutuamente y se tomaron de las manos. Llegó la hora.
"Listas" dijeron ambas con una mirada segura y decidida.
-Suerte, mucha suerte chiquita, no te vayas a despeinar eh? -dijo Jeff.
-Hehehe... bueno yo, salvaremos la isla de como de lugar, mi código de justiciera aún lo llevo en la sangre, no los defraudaré amigos -dijo Grace.
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Divinity: ¿Que haremos hermana Trinity? Finity no quiere reaccionar, sigue así... congelada, pensante.
Trinity: El espacio tiempo sigue rompiéndose en millones de fragmentos. Si calculamos el valor del universo y de la existencia misma, eso nos da que al 'universo 20' le queda poco.
Divinity: Vaya hermana, no sabía que tenías el mismo tes de inteligencia qué Finity. Estoy completamente anonadada.
Finity: Hay que tener paciencia. El universo 20 no durará mucho, eso significaría el fin de nuestra existencia. Hermana Divinity, hermana Trinity. Prepárense. En todo caso, tengo otro plan para erradicar dicha situación.
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-Dale Kiky, estamos listas -dijo Francine.
Huscky procedió a ir hacia la maquina. Presionó unos cuantos botones y antes de presionar el gran botón, dijo: "Antes de ir, yo estaré monitoreando sus coordenadas con esta tecnología de punta. Si en algún punto llego a perderlas, fué un gusto en conocerlas."
-¿Espera qué? Dijeron Grace y Francine.
Huscky presionó el botón, un corto circuito de iniciado ocurrió y Grace junto con Francine fueron teletransportadas.
Oye mamá, ¿Por qué les dijiste eso de recién? -preguntó Jeff.
-No es nada, solo fué una precaución. Podré ser inteligente y seca para la tecnología, pero no soy una Diosa como para estar protegiendolas a todo momento. Soy alguien de mediana edad, no estoy en mi juventud, Jeffrey.
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Grace y Francine pasaban por un escenario totalmente surreal, el fondo era completamente con toques cósmicos color morado. Ellas dos volaban a gran velocidad mientras veían rayos y objetos relacionados al tiempo. Pasaron cuarenta segundos hasta que entre todos los gritos de desesperación, aterrizaron en la primera realidad de muchas que habrán más adelante. Buena suerte.