Desde que cerré mis ojos, quede en una oscuridad qué me envolvía todo mi cuerpo, me sentía como si estuviera flotando en un suave rio, llevándome a donde el quisiera, la fluidez cubria casi llegando a mi rostro.
Pero cuando menos me lo espere, abri mis ojos en un lugar diferente, tengo mucho miedo, no se porque me encuentro en este lugar tan extraña, quiero alejarme, pero mi cuerpo no respondía.
Veo que sigo siendo pequeño con mi yukata mal cuidada, tal cual como escapamos mi hermana y yo de nuestro hogar, aun veía las manchas oscuras qué me dejaron la sangre, sintiendo la nausea qué no salio en ese momento, el olor fétido aun podia recordarlo, tan fresco en mi memoria
" ¿que es este lugar tan extraño? ... es, muy raro, ¿donde quedó el bosque? ¡hermana mayor! ¿estas aqui? " hablaba con algo de fuerza, estaba preocupándome, sintiendo como queria llorar.
No queria estar solo, tan solo no mirar a mi hermana me estaba colocando sensible, tengo mucho miedo.
Tengo mucho miedo.
Agitado volvi a tratar de moverme en esta posición, queria levantarme de este asiento tan raro.
Todo estaba lustrado, veia como una cosa rara y larga pasaba a todas velocidad, veia el interior, tenia personas, ¿era a caso algo de chakra? No siento esa energía.
" hermana... por favor ven, tengo miedo, ¡hermana! " segui rogando, ahora soltando lágrimas, mis manos estaban temblando, sintiendo las imágenes incesante de lo que cometí
De verdad... hermana, ven por mi.
Te lo suplico.
Cerré mis ojos con fuerza, entre todo ese lugar, lo unico que podia escuchar eran mis sollozos dolorosos y lastimeros.
Ni siquiera en donde me encontré, tengo la fuerza necesaria para liberarme, soy un total inútil.
Un total fracaso.
Estuve alli mucho tiempo, al menos eso me pareció, sufriendo en mi miseria, pero escuche una voz qué parecía muy juguetona, era de un hombre.
" Yūji, apenas tienes cuatro años y ya estas teniendo crisis adulta, ¿tal parece que me necesitas donde estas? "
Antes de levantar mi mirada, mis ojos se abrieron con fuerza al escuchar una voz nueva, levante con fuerza mi cabeza cuando escuche terminar esa frase y la dirigi hacia el costado de mi cuerpo.
Creí que miraría esa versión adulta de mí, pero ahora se encontraba una hombre demasiado alto, que tenia una banda negra alrededor de donde deberían estar sus ojos, un cabello blanco, pareciendo reflejar la luz que proviene de este lugar tan extraño.
Tenia una sonrisa burlona y alegre, que me hizo sentir incomodo.
" ¿de que esta hablando, señor? ¿Quien es usted? ¿De casualidad ha visto a mi hermana? No se como apareci aquí, ¡tengo que volver con ella! Ella estaba demasiado cansada y debil... tengo que proteger la " quise testificar, esperando que ese señor me liberará y correr directo en busca de mi hermana.
Pero lo que me irrito fue su contestación, tenia un deje de enseñanza, como si fuese un maestro " ah, ahora, por supuesto que no conozco a tu hermana, pequeño Yuji, ¿pero que me digas señor? ¿no me digas que no te acuerdas de mi? ¡soy tu persona favorita! " vi como se sentó a un costado mío, aunque no podia mirar sus ojos, yo sentia su mirada penetrante.
" no... ¿debería conocerlo?... espere " ahora me puse a pensar.
Ojos cubiertos.
Cabello blanco.
Traje negro y pantalones blancos.
" usted es... ¡un viejo qué siempre invade mi mente fastidiando me! ¡por su culpa siempre tengo dolor de cabeza! " quise golpearlo al recordarlo, pero mi cuerpo sigue sin reaccionar
Casi vi como ese viejo se fue hacia adelante con un gesto qué tengo que decir, es gracioso, parece como si mi comentario lo lastimara profundamente
" nadie me había dicho una cosa tan horrible antes... " su voz salió aguda, una muy chillona y fastidiosa, sosteniendo su pecho en donde estaba especificamente su corazon, lo mire con una gotas de sudor bajando de mi frente, creo que este hombre esta mal de la cabeza.
" si, así como me escuchó, usted solo aparece en mi mente como una persona muy fastidiosa, he deseado qué desaparezca de mi mente tantas veces... no logro entenderlo, ¿porque siguen apareciendo en mi mente? ¿Porque cada que lo recuerdo, siento que me estoy lamentando de algo? " mi mirada se fue perdiendo cuando comencé hablar.
Pero no pude notar como, ese albino ahora dejo de jugar sin poner esa cara tonta qué siempre me irritaba, ahora se veía con una enorme seriedad, aunque teniendo una sonrisa de tristeza, una lástima hacia mi.
" ¿quieres saber porque sigo apareciendo en tus memorias?... " escucharlo tan serio me hizo mirarle, viendo como tenia una sonrisa amarga, no hablé, queriendo que continuara, soltó un suspiro cuando lo vi seguir hablando; " yo... realmente no estoy orgulloso de todo lo que te hice pasar siendo a penas un joven, realmente joven, todo tu sufrimiento, recolectando cada dedo de sukuna, dándote una carga que no fue fácil de soportar... de verdad que fui un pésimo maestro, ¿no? Porque después de muerto, tu seguiste con lo que era mi deseo para ustedes, tanto a Megumi como a Nobara " ver como su voz estaba cargada de sufrimiento retenido, mi corazón palpito con rapidez y dolor.
" Megumi... Nobara... " susurre esos nombres, me quede congelado por esos nombres, pasaron segundos antes de que tuviera que cerrar mis ojos con fuerza, ahora por fin tuve el movimiento de mi cuerpo, pero esta vez solo lleve mis manos directo a mi cabeza, soltando un pequeño grito lastimero
Era demasiado doloroso.
Mi respiracion era erratica, las lagrimas volvieron a salir, pero no me importa. " Megumi... y Nobara... ellos... " fui alzando mi vista hasta llegar a unos ojos azules qué parecían el cielo mismo, este mismo me apreciaba con un gesto qué realmente no espere ver " usted... es... tu eres, ¿Gojo-sensei?... ¿realmente es usted Gojo-sensei? " mi voz estaba rota, seguia llorando mediante meditaba qué realmente estaba frente a mi.
Vi como me dedicaba una sonrisa más real " veo que te han llegado los recuerdos por fin, realmente- ¡ah, woah! " ni siquiera lo deje terminar cuando me lance a sus brazos, lo aprete con rudeza, sintiendo temblar mis manos.
En ese momento, ni siquiera me di cuenta cuando ya habia crecido, ya no era el niño de 4 años que estaba atrapado en ese lugar.
No podia notar el rostro qué ponía mi sensei, pero estoy seguro que era uno tan triste y melancólico. " oh, Yūji, realmente... eres un niño en este momento " escuche como bromeó.
Pero tiene totalmente la razón.
" nunca pudiste llorar frente a los chicos, ni con nadie, porque estabas teniendo una carga tan pesada en tus hombros, tenias que ser fuerte, viste morir a cada uno frente a tus ojos, pero no podías llorar por ellos... ahora tus lamentos y tus lloros, son por ellos... suelta todo, niño, suelta lo " escuchaba hablar a mi sensei, mediante escuchaba sus palabras, yo segui llorando, apenas eran unos sollozos leves qué lentamente fueron saliendo de mi garganta, tan quebradizo qué me estremeció, escondiéndo me entre esa ropa oscura de mi maestro.
Mis lágrimas, mis llantos desgarradores, mi dolor resentido, ahora mismo lo estaba dejando salir, lagrimas de haber sido tan débil y no poder liberar a toda la gente inocente qué murió en los atentados de Sukuna, llantos desgarradores por ver la destrucción en cada momento, mi dolor resentido de haber muerto justo cuando tenía una oportunidad de vivir.
Porque toda mi vida estaba en cautiverio. Toda mi vida fue una mentira, una vil mentira.
" después de todo... eras un niño cumpliendo problemas de los adultos " escuche su suspiro, sentia la mano de Gojo-sensei en mi cabellos, no me había dado cuenta que entre mis lamentos me había agarrado a su ropa de una manera que la punta de mis dedos se habian colocado blancas.
Mi sensei fue comprensivo, me desahogue de todos mis pesares, a pesar de haber muerto con una sonrisa, tenia en mis sombras mis viles penurias.
Me separe con ojos hinchados, apreciando como Gojo-sensei estaba aun con una sonrisa comprensiva " ¿te sientes ligero ahora? "
" si... ahora creo que... estoy demasiado liviano, de verdad tenia mucha carga acumulada, se los agradezco, sensei " el murmullo brotó de mis labios, aunque dedique una sonrisa ahora más reluciente.
Y de nuevo volvio su personalidad juguetona, tal cual como lo conozco " ¿no tendrá sientes diferente ahora? "
Parpadee un par de veces antes de darme cuenta que estaba cara a cara con el, ¿habia crecido?
Mire mis manos y mi cuerpo, la misma ropa de jujutsu high qué recuerdo " ah, mi cuerpo... "
" no te emociones, podrás estar grande aquí, pero sigues siendo un pequeñito de cuatro años, tan chico y tierno " lo último lo escuché como lo dijo demasiado acaramelado, avergonzado lo mire
" creo que... tiene razón, sensei " era demasiado bueno para ser verdad.
Vi de nuevo como se coloco serio, esta vez apreciando como algunas veces se le escapa la tristeza, aunque lo ocultaba perfectamente " muy bien, Yūji, parece que recuerdas al menos unas cuantas cosas ahora, ¿no? Ahora podré explicarte porque aparecía en tu mente sin desearlo, pero primero... dejame explicar, que sucedió después de tu muerte " vi como suspiró, se notaba preocupado pero no podia hablar en ese momento, no lo interrumpi, esperando que siguiera. " de verdad te quisimos dar el abrazo completo, pero... después de reflexionar, tu vida fue fugaz, no disfrutaste tu juventud, la mayoría la pasaste por la pelea contra sukuna y matando maldiciones... siendo tu maestro, ¿cómo podia permitirme qué no disfrutarás de tu vida? " vi que me regalo una sonrisa, una que yo se lo devolví.
Aunque noto como la sonrisa se torció " yo realmente deseaba qué vivieras una vida feliz, que tuvieras una familia qué te amara, valoraras cada sentimiento, sin embargo... después de apreciar con los pequeños fragmentos qué te deje de mi propia escencia en tu alma, el mundo en donde vives ahora, es muchísimo peor de lo que imagine, crei que reencarnas te en otro país, no qué, ¡no que terminaras en otro mundo totalmente diferente! ¿Sabes como Geto se estuvo burlando de mi en mi cara cuando puse una terrible expresión de sorpresa? " ahora aprecie como sus ojos parecían casi salidos y se acercaba a mi demasiado, demasiado cerca.
Por supuesto yo inmediato coloque mi mano en la cara de sensei y lo empuje hasta un lugar más estable donde hubiera espacio personal.
" realmente no puedo imaginar me lo, sensei, y yo también, con todo lo que he vivido, al menos antes de que mi subconsciente despertara, creo que he sufrido mucho... volvi a perder a mi familia, al menos, esta nueva familia qué me tocó, mi madre murió cuando apenas era un bebé, mi hermana fue quien me crió hasta ahora " hable con sinceridad, me hice la idea clara por todo lo que he pasado en solo cuatro años, no podia imaginar me lo que sucedería después.
Los fragmentos desde que nací estaban en mi mente, recuerdos vividos, antes de despertar, no recordaba el rostro de mi madre... ahora podia verlo claramente cuando me abrazaba y me sonreía.
Tanto en mi anterior vida como en esta, siempre he perdido a mi madre...
" aunque, esquivando eso, realmente no puedo imaginar que de verdad existiera otro mundo diferente de donde venimos, en donde me encuentro es todo muy antiguo, no hay ciudades, ni lugares de tren como aquí " mire a mi alrededor de ver la estación del tren donde aparecí, me recuerda cuando use mi expansion de dominio contra sukuna.
" es por eso que inicie a filtrar me en tu mente, realmente no queria utilizar un pequeño fragmento de mi alma para reactivar tu subconsciente, crei que estabas viviendo una buena vida Yūji, pero ahora... estas enfrentando peligros, creo que mucho más peligrosos qué las maldiciones " vi como Gojo-sensei se colocaba con un gesto lleno de preocupacion, en mi anterior vida, nunca lo mire con ese rostro. " ver que ahora tienes tu alma vieja combinandose con la nueva, en un estado recíproco, es una buena señal... ¿mh? " vi como Gojo-sensei se miraba a si mismo, también note con sorpresa como mi maestro se iluminaba, pequeños fragmentos rompiendo se, esparciendo se en pequeño motes de polvo.
" ¿que esta sucediendo sensei? ¿Porque será mira así? " estaba realmente preocupado, no queria ni tocar a Gojo-sensei en peligro de romperlo, vi como ahora sonreía divertido
" ¿no lo vez Yūji? Parece que la escencia de mi alma qué te impregné esta regresando al lugar donde pertenece, mi trabajo solo era volver a reanimar tu alma madura junto a la joven en espiritualidad, mi trabajo esta hecho " la sonrisa que tenia era genuina.
" ¡Sensei! A-Antes de que desaparezca, ¿Sabes algo sobre Nobara y Megumi? ¿Yuta, Maki? ¿Sobre todos? " estaba asustado, con ojos lagrimosos al ver como nuevamente estaba quebrandose y partículas flotando a su alrededor.
" Yūji... no debes preocuparte por ellos, ellos ahora están viviendo una buena vida " su mirada se suavizo al mirar al ahora pelirrojo " están viviendo bien, todo gracias a tí... ¿Sabes lo que dijo mi chico Megumi una vez?... esta viviendo doble, porque cada momento que disfruta, lo hace con la certeza de que tú también lo disfrutarías, también había dicho que... a pesar de quedarse solo terrenal, siempre lo acompañas en cada memoria tuya, él, no esta solo " a pesar de tener aun mis ojos algo hinchados, de nuevo las lagrimas me traicionaron, comenzaron a caer sin remedio, recordando lo que le dije a Megumi antes de fallecer.
" todos ellos te agradecen, por todo lo que hiciste por ellos, por proteger los, Yūji, lo hiciste bien... todo lo hiciste perfecto " la voz de sensei era sincera y llena de calidez, mis piernas no soportaron y caí directo al suelo, mis lágrimas desconsoladas de saber que ellos estaban viviendo bien, que ya no tenian qué preocuparse de Sukuna.
" Sensei... " mí voz ya no pudo salir, me dolía siquiera decir una palabra mas.
" no puedo estar más contento de haber te tenido como mi estudiante, Yūji, te implique mucho peso en tus manos, pero, de todo corazón, ya no como el que fue honrado, si no como Satoru, te agradezco tu sacrificio... en nombre de todos, por ser la salvación del mundo " vi como sensei se inclinaba hacia mi con profundo respeto, que me hacia temblar más, no podia emitir ninguna palabra.
" Se-Sensei... "
" esta vez, puede ser ahora si, un adiós definitivo Yūji, todos los que conoces ya no podremos volver a verte " vi como me miraba con una sonrisa amarga y desolada, " pero como tu sensei, dejame darte un último regalo para tí, para que al menos puedas recordar a este tonto hombre que se comportaba de manera infantil " se burlo de si mismo
" Sensei, ¿que...? " vi como su mano agrietada y vibrante de luz choco con mi pecho, sorprendido aprecie como al instante, la mayoría de luz que irradiaba Gojo-sensei había desaparecido, las grietas se expandieron con una rapidez inalcanzable. Mire con una mirada sorprendida al qué era el fragmento del hombre que para mi, siempre fue el más fuerte.
" te di la mayoría de mi fragmento de alma, Yūji, energía maldita mía te fue heredada, también, estoy seguro que descubrirás mas la función de ese fragmento " vi su radiante sonrisa, alegre de lo que cometio a pesar de estarse esparciendo en fragmentos.
" Gojo-sensei... de verdad, muchas gracias... Los voy a extrañar a todos, a todos mis amigos, por favor, dígales qué nunca los voy a olvidar... siempre estarán en mi memoria " mi voz quebrada dejo en evidencia mi dolor de que será la última vez que apreciare a mi maestro, pero di también mi mejor sonrisa.
" a pesar de las condiciones qué vives, espero de alma, que puedas encontrar tu felicidad, tu propósito en esta vida, protege a los que quieres... y puedas tener una larga vida, Yūji..." ya no quedaba más de la mitad del cuerpo de mi maestro, sus ojos azules cielo mirándome con orgullo " adiós, Yūji... "
" adiós, sensei, a pesar de no volverlo a ver... sus lecciones, y todos lo que pasamos juntos como con Megumi y Nobara, serán mi guía eterna, un legado qué solo perdurará " hable firme, dedicandole ahora una sonrisa determinante a Gojo-sensei.
Vi como sonrio, llegando ya casi a su rostro el desmoronamiento " es bueno saberlo Yūji... es bueno saberlo "
Lo último que mire de sensei, fue como me dedicaba una sonrisa sincera.
Y yo quede en ese lugar con una sonrisa firme, aunque las lagrimas caian, recordando me, que ya no volveré a ver a mis amigos, ni a mi sensei, ni todo lo que conocia.
Entre la ahora soledad, apreciaba como los últimos motos de polvo de lo que era Gojo-sensei desaparecían frente a mi, danzando en el aire.
Un último recordatorio qué esas particulas, en ellas, ya no se volverían a manifestar.
Mi anterior vida... se esfumó como esas partículas
Esta vez... comenzaré de nuevo.