En el momento en que los tres entraron en la torre mágica, vieron al Mago Morton de pie frente al círculo de teletransportación con una amplia sonrisa.
—¡Profesor! —Los tres inmediatamente avanzaron e hicieron una reverencia.
—Camila y Carlos, vosotros dos podéis ir primero. Abel, ven conmigo —dijo el Mago Morton asintiendo y haciendo una señal a Abel con su mano.
—Profesor, ¿a dónde vamos? —preguntó Abel al Mago Morton, que estaba de pie en el centro del círculo de teletransportación.
—La sede de la Unión de Magos está en el Ducado de Keyen. Es la sede de la Unión de Magos más cercana desde aquí —empezó a iniciar el círculo de teletransportación el Mago Morton.
En un destello, ya había llegado a otro círculo de teletransportación. Aunque la disposición de este círculo de teletransportación era exactamente la misma que la del círculo de la torre mágica de Morton, Abel podía decir que era otra torre mágica por las decoraciones exteriores.