—Esta frase, como un rayo, ¡cayó de repente desde el cielo!
—Un enorme miedo explotó en el corazón de Fang Qingya, como un rayo caído del cielo.
—La luz del sol afuera de la ventana cayó sobre su rostro, como un balde de agua fría derramado sobre su cabeza, haciendo que su cara pareciera pálida como la muerte.
—Su salud siempre había sido buena, nunca había estado realmente enferma, y mucho menos había tenido sangre extraída, por lo que nunca se había sometido a una prueba de tipo de sangre.
—Solo porque había huido de casa se había lastimado accidentalmente, y si no hubiera sido por la necesidad de una transfusión de sangre, no habría sabido hasta hoy que su tipo de sangre era en realidad AB.
—La voz de Fang Qingya tembló —dijo—. ¿Mis padres, mi hermano mayor y mi segundo hermano... Todos son realmente de tipo sanguíneo O?
—¿Entonces cómo es que solo ella era tipo AB?