No sabía qué iba a decir Ye Wanlan, y tampoco sabía si ella estaba al tanto de sus acciones...
Pero ¡cualquier cosa que saliera de su boca sería absolutamente perjudicial para él de cualquier manera!
¡No podía permitirle hablar!
—¡Lin Yue! —Lin Woyu gritó con furia—. ¿Qué crees que estás haciendo con tu primo?
—¡Lin Yue! —Lin Weilan también estaba extremadamente furioso.
Con las habilidades de Ye Wanlan, ¿cómo podría Lin Yue siquiera tocarla? Ella simplemente pellizcó el hombro de Lin Yue ligeramente, torciendo con destreza el omóplato con sus dedos.
Lin Yue solo sintió que toda su fuerza se había drenado en un instante, su brazo entero se adormeció.
—¡Bang!
Ye Wanlan luego levantó la pierna, golpeando la rodilla de Lin Yue, privándolo completamente de la capacidad de moverse.
Aunque Lin Yue medía 1.8 metros de altura, era fuerte por fuera pero débil por dentro. Sus piernas cedieron, y se arrodilló en el suelo.
—Ah Lan... —Lin Weilan exclamó conmocionada.
