—Vamos a la puerta —sugirió Jian Yunnao tras pensar por un momento.
—De acuerdo —respondió Mo Shiyun.
Ambos se dirigieron a la puerta.
—¿Dónde pusiste tu regalo? —preguntó Jian Yunnao a Mo Shiyun.
—Aquí —dijo Mo Shiyun—. Señaló el lugar junto a la puerta y continuó hablando—. No sabía que iba a cenar con ustedes ese día... Por eso dejé el regalo junto a la puerta. Supuse que alguien llevaría la bolsa adentro si la veía.
Si Mo Shiyun había colocado la bolsa allí, alguien la habría visto y la habría llevado adentro.
Jian Yunnao miró alrededor de la puerta. Encontró una bolsa de papel en los arbustos no muy lejos de la puerta.
La bolsa estaba húmeda de rocío y estaba arrugada.
Era obvio que la bolsa había estado en ese lugar durante varios días. Había estado expuesta al viento y al sol.
Cuando Jian Yunnao abrió la bolsa, encontró un suéter negro y una bufanda negra que tenían bordados.
—¿Este era el regalo que habías preparado? —preguntó Jian Yunnao.