La abuela Jian hizo énfasis en el hecho de que Jian Yiling había hecho el suéter por sí misma. ¡De otro modo, Jian Yujie habría asumido que Jian Yiling lo había comprado en línea!
A pesar de estar ocupada todos los días, Jian Yiling aún pensaba en tejer un suéter para Jian Yujie. Era importante que Jian Yujie conociera sus intenciones.
Para que él supiera que el cariño entre ellos no era unilateral. Su prima también pensaba en él.
—La abuela Jian es increíblemente buena con la Señorita Yiling y el Joven Maestro Yujie —dijo el chófer.
—Esto ni siquiera es ser buena. El sueño de Yujie es convertirse en mago. No puedo hacer mucho para ayudarlo. Honestamente, ni siquiera sé qué camino tomará en el futuro —la abuela Jian estaba bastante preocupada por Jian Yujie.
Sin embargo, no quería interferir en la vida de su nieto. Si lo hacía, potencialmente podría causar discordia en la familia.
