—¡Sou! ¡Sou! —Justo cuando estaba a punto de continuar atacando a la mujer enmascarada, fue atacado por el costado.
—Shua! —Reaccionó al instante y esquivó hacia un lado. Mirando hacia allá, vio a Bartan escondiéndose detrás de un árbol a 100 metros de distancia y atacándolo con otra bola de agua. También esquivó rápidamente esa.
—¡BANG! ¡BANG! ¡BANG! —Las tres bolas de agua pasaron junto a él y chocaron contra los árboles detrás de él. Inmediatamente, tres troncos de árboles de un metro de grosor se hicieron pedazos.
—¡Qué poder! —exclamó Max mientras se limpiaba el sudor frío de la frente—. Si hubiera llegado incluso un segundo tarde, habría resultado gravemente herido si no muerto. No tenía suficientes alucinaciones para pensar que su cuerpo era más resistente que el árbol.
