Leng Shaoting no era exigente con los restaurantes, pero eligió uno elegante con un ambiente romántico cuando estaba con Gu Ning. Aunque no hablaban mucho estando uno frente al otro, disfrutaban estar juntos.
Leng Shaoting pidió un bistec, mientras que Gu Ning solo pidió una taza de café porque ya había comido.
Leng Shaoting frunció un poco el ceño con evidente insatisfacción. —¿No temes que afecte tu sueño?
—Para nada. No me afecta —explicó Gu Ning. De hecho, Gu Ning tenía su poder, así que podía dormir o permanecer despierta cuando quisiera.
Entonces Leng Shaoting no insistió.
De repente, Gu Ning se dio cuenta de que había olvidado completamente su plan sobre la Montaña Yuntai, pero ahora no tenía tiempo y solo podía esperar hasta que volviera de la Ciudad G.
Cuando eran casi las 10 pm, los dos se fueron. Leng Shaoting llevó a Gu Ning de regreso a la zona G, y como de costumbre, no se fue hasta que ella desapareció completamente de su vista.
