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Qin Haozheng y su esposa le dijeron a Qin Yiqing que no se entrometiera en los asuntos personales de Qin Yifan. Aunque no estarían contentos de ver a su hijo terminar con una chica ordinaria, aún querían que Qin Yifan encontrara su amor y viviera una vida feliz.
También pensaron que Li Zhenzhen era una gran elección, pero dado que a Qin Yifan no le gustaba, no podían obligarlo a hacerlo. Si forzaban a Qin Yifan a casarse con Li Zhenzhen, su relación padre e hijo empeoraría.
Sin embargo, Qin Yiqing era pretenciosa y terca. La pareja de Qin Haozheng apenas podía comunicarse con ella.
Por suerte, creían que Qin Yifan era capaz de tomar decisiones por sí mismo.
La actitud de Qin Yifan rompió el corazón de Li Zhenzhen. Ella pidió irse a Ciudad G el sábado por la mañana. Qin Yiqing entonces tuvo que llevarla al aeropuerto en persona.
