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Como si estuvieran asustados por la figura fantasmal de Ye Mo, todos sacaron sus armas en el coche. La persona que iba al frente era una joven casada extrañamente bella.
—Wen Dong... —Ye Mo de repente se sintió culpable. Aunque la muerte de Wen Dong no fue debido a él, ella fue torturada así probablemente porque no quería revelar dónde estaba la información.
Wen Dong abrió lentamente los ojos con el tratamiento enérgico del fuerte chi de Ye Mo. Cuando vio a Ye Mo, se sorprendió y rápidamente dijo en una voz que incluso Ye Mo apenas podía oír:
—Ye Mo, lo siento, te involucré en esto. Norte Arena está buscando el modelo, ve rápido, yo no dije... —Fueron solo estas pocas palabras las que usaron toda su potencia y fuerza vital. Su cabeza cayó en los brazos de Ye Mo mientras cerraba lentamente los ojos.
