Una idea se formó sólidamente en mi cabeza y echó raíces. Sabía lo que tenía que hacer. No quería causar demasiado alboroto, así que aunque tenga que ir por un camino indirecto, todavía puedo seguir adentrándome en mazmorras hoy.
El plan era dirigirme a otra mazmorra después de dejar [Paraíso del Simio]. Por más que quisiera entrar de nuevo en la mazmorra, sé que sería fácilmente reconocido en el momento en que me dirigiera otra vez a la entrada.
No voy a sumergirme repetidamente en mazmorras con una velocidad de limpieza tan rápida hasta que tenga cierta medida de confianza para poder protegerme de la mayoría de las amenazas. El objetivo por ahora es... poder parecido o equivalente al Rango B.
Había un solo Cazador Rango B en esta ciudad, y era una celebridad conocida. La fuerza que mostró hizo que muchas personas temieran, ya que incluso las balas y francotiradores eran ineficaces contra alguien de rango B.
La ciudad en la que me encuentro, Banco Exterior X, era solo una ciudad de tamaño pequeño con algunas mazmorras, siendo el rango más alto C. Otras ciudades más hacia el interior tienen cazadores mucho más poderosos con mazmorras de niveles aun mayores.
Mi próxima parada será en la mazmorra de rango E, [Yermos Páramos], que muchos cazadores no frecuentaban. Con las características extremadamente frías, esta mazmorra tenía 20 pisos, con varias bestias de atributos fríos apareciendo. Debería ser aún más fácil de limpiar con mis constantes lanzamientos de [Bola de Fuego].
Sin embargo, antes de dirigirme a [Yermos Páramos], quiero seguir probando cuántas veces más puedo lanzar mi única habilidad en este momento, [Bola de Fuego]. De las 500 veces anteriores, la he lanzado más de 200 veces mientras limpiaba esta mazmorra.
Al finalizar mis pensamientos, me alejé del cristal verde y comencé mi experimentación de si podría lanzar habilidades sin fin o si tenía una cantidad anormal de [Enfoque] que no podía ver.
Así, se desplegó una escena extraña en el último piso de [Paraíso del Simio], con un hombre solo lanzando continuamente bolas de fuego. Estallaban a unos metros de él, y más seguían justo después.
Pasaron 20 minutos.
Todavía estaba lanzando [Bola de Fuego] sin parar, lo que causaba que mi corazón latiera descontroladamente inclinándose hacia esa idea loca. Aproximadamente más de mil lanzamientos en los últimos 20 minutos... continuemos un poco más.
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40 minutos después, había pasado la emoción, superado el miedo, dejado atrás la idea ridícula... y la había asumido como un hecho. Esto era algo más allá de mis sueños más locos, y ni siquiera entendía cómo podría ser posible.
En la última hora, había lanzado una habilidad de rango F, [Bola de Fuego], más de 3000 veces... ni siquiera alguien de rango A, o el Cazador Clasificado más alto conocido, Acero Mikhail, sería capaz de hacer algo así. Esto me asustó y me dio una esperanza desenfrenada de algún día estar no muy lejos de ellos.
A lo largo del tiempo, las bolas de fuego que salían se volvían gradualmente más condensadas, y sus explosiones más pronunciadas y viajaban mucho más rápido. En los últimos 10 minutos, en lugar de lanzar 1 bola de fuego cada segundo, 2 salían disparadas por segundo.
Aparentemente se estaban volviendo más pequeñas, más rápidas y más explosivas a medida que continuaba lanzándolas. Esto debería ser mi habilidad mejorando a una velocidad loca y estúpida debido a la cantidad de veces que lanzo la habilidad. Mi panel actual se veía así:
[Noah][Ocupación: Cazador]
[Vitalidad: 10]
[Enfoque: - ]
[Fuerza: 10]
[Habilidad(es): (Bola de Fuego-59)]
La habilidad para la habilidad [Bola de Fuego] había aumentado asombrosamente hasta 59, una cifra loca para procesar. Hasta donde yo sabía, había muy pocas personas que tuvieran su habilidad superior a 30, ya que los Cazadores continuamente se mejoraban a sí mismos y obtenían habilidades de mayor rango con el paso del tiempo.
Un Cazador Rango F usando [Bola de Fuego] como su primera habilidad pasaría a usar una habilidad de rango E tan pronto como tuvieran fondos para comprar una. Nadie pasaba tanto tiempo usando una de las habilidades de rango más bajo por un período extendido de tiempo.
Mirando la alta habilidad, estaba emocionado por lo que pasaría si continuara lanzando y aumentándola aún más. El poder de la habilidad [Bola de Fuego] actualmente debería superar cualquier otra habilidad del siguiente rango en el daño y la velocidad con la que vuela, es muy probable que esté acercándose al rango D en su capacidad ofensiva.
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Tenía muchas ganas de continuar mi prueba de lanzamiento interminable pero me obligué a parar y seguir con los planes de mi agenda.
Me moví hacia el cristal verde aún brillante en el medio de la sala y coloqué mi mano sobre él, lo que me teletransportó instantáneamente fuera del monolito. Aparecí no muy lejos de la entrada, con algunas personas mirándome con expresiones sorprendidas.
—¿Su equipo completo fue eliminado o tenemos a un clasificado aquí? —Cazador F.
—¡Já! ¿Un clasificado? ¿Alguna vez los has visto vestidos así con una mochila endeble sobre ellos? Mis disculpas, chico, espero que no fueran tus amigos más cercanos —Cazador G.
Algunas personas notaron las anomalías ya que alguien terminó la mazmorra y fue transportado solo. Mi atuendo actual realmente no coincidía con el de alguien de Rango C o superior, como muchas personas rápidamente notaron.
La mayoría de las personas que estaban allí hace una hora y media cuando entré en la mazmorra ya se habían ido o no prestaban atención, ya que el recinto que rodeaba la mazmorra era un espacio bastante grande.
Ignoré las miradas de lástima de los Cazadores que pensaban que el resto de mi equipo había desaparecido y me dirigí hacia la puerta. Curiosamente, me estaba acostumbrando cada vez más a ignorar las miradas de otras personas a medida que avanzaba el día.
Fuera de la puerta, había algunos puestos y gente corriendo. Fui hacia otra sección donde había algunos coches alineados y planeé usar el sistema de Viaje de Cazadores.
Había muchas personas que ganaban su vida llevando cazadores de mazmorras al Centro del Despertar o a su alojamiento. Era un trabajo muy peligroso ya que siempre puedes tener un cliente inestable, pero esta vez son personas superpoderosas que podrían hacerte volar o romperte el cuello con un giro de sus manos.
Un hombre se me acercó rápidamente con una expresión sonriente y preguntó si necesitaba un viaje. Asentí y rápidamente subí al Dodge Charger estacionado frente a mí, nuestro destino, [Yermos Páramos].
En el viaje de 25 minutos hacia la próxima mazmorra, seguí pensando en las cosas que me había perdido y repasé mis planes para los próximos días.
El tiempo pasó rápidamente y nos acercamos a otro enorme monolito, este con un ligero tinte de naranja. A muchos cazadores no les gustaba limpiar esta mazmorra debido al frío extremo, lo que resultaba en limpiezas obligatorias por parte del gobierno de manera rutinaria.
Sin embargo, me tomaría mi tiempo en esta mazmorra, ya que había significativamente menos cazadores, e incluso una sola carrera probablemente me reportaría más del doble del dinero que hice en [Paraíso del Simio].
Pagué la alta tarifa y salí del auto, mostrando mi licencia de cazador a los guardias en la puerta, quienes no se molestaron conmigo después de darme una segunda mirada y sacudir sus cabezas.
—Oye, te prometo que no soy solo un cazador en una misión suicida ¿de acuerdo? —dijo.
Miro alrededor del recinto de esta mazmorra y me dirijo hacia la entrada. Ni siquiera había un equipo en espera para entrar. Con algunos cazadores agrupados en algunos puestos y tiendas vendiendo comida y equipo.
Nada me detenía mientras rápidamente iba a la entrada y ponía mi mano en una de las puertas cuadradas, que rápidamente me transportaba al primer piso de la mazmorra de rango E, [Yermos Páramos].
Rápidamente fui asediado por el frío que alejaba a muchos cazadores, y rápidamente lancé 2 bolas de fuego que esta vez no se alejaron de mí sino que me rodearon. Hacer esto normalmente requeriría que los cazadores proporcionaran más energía continuamente, pero nada de eso se podía sentir en mí.
Tan pronto como ordené a las bolas de fuego que me rodearan a unos metros de distancia, el frío se compensó en gran medida y no estaba ni cerca de donde estaba antes.
Aunque no había pausa que otorgar, pronto oí el gruñido de los animales que rápidamente se mostraron. Lobos blancos claros venían corriendo hacia mí, sus dientes blancos brillantes destellaban amenazadoramente en el páramo blanco.
Sin embargo, no había ni un atisbo de miedo en mí, ya que me movía con confianza. [Bolas de Fuego] condensadas salían rápidamente de mí a alta velocidad, estallando en los cuerpos de los lobos y soplando masas de carne.
El grupo fue rápidamente atendido en la primera ráfaga de bolas de fuego, y todo lo que quedaba para mí era recoger el [Núcleo] que cayeron.
Miré hacia adelante al camino brumoso y frío frente a mí mientras corría por esta mazmorra de 20 pisos que sería el comienzo de mi viaje.