Theo se despertó a las 6 de la mañana, pero no se levantó de la cama hasta pasadas las 10. Paso 3 horas acurrucado en ese viejo y mohoso colchón en el que solía dormir, recordando cada decisión que había tomado en los últimos 10 años, preguntándose su pudo haber hecho algo distinto, preguntándose si pudo hacerlo mejor, preguntándose si pudo evitar hacerlo…
Cuando finalmente se levantó, se vistió, se puso su gabardina negra y salió de su ''cueva''. Había explorado esos túneles por 6 años. Podía ir con los ojos cerrados y aun así llegaría a la superficie sin problemas. Mientras caminaba por aquellos túneles repaso su lista mental de las cosas que tenía que hacer. Antes de darse cuenta había llegado a su cafetería de costumbre. Entro y se formó en la fila. Había varias personas. El odiaba a las personas. Pero odiaba aun más de lo que las personas hablaban todo el tiempo: superhéroes. En cada teléfono de las personas en la fila estaba llena de noticias y videos sobre superhéroes. << The Primordials confirman su asistencia a la Comic Con San Francisco>> << Furros exigen derechos>> <
Estaba harto. Por suerte, ya era su turno de ordenar su café. Lo pidió como le gustaba, negro, sin azúcar. Sin eso tal vez volvería a tumbarse en su asqueroso colchón viejo a acurrucarse mientras su mente se devora a sí misma. Después de recibir su café Sali de la cafetería y camino por la vereda. Las calles de New York estaban a rebosar de gente y él ODIABA a la gente. Los sonidos de los autos, las personas, la ciudad, lo aturdían. Deseaba salir volando de allí, a un lugar más tranquilo, lejano… Pero no podía, ya no.
Decidió dejar de pensar tanto en eso. Tenía una larga lista de tareas para mantenerse ocupado. Mientras caminaba reviso su celular. Ignoro tanto como pudo todas esas noticas sobre superhéroes. Después de un rato encontró lo que buscaba. <
Theo conocía a Al desde que tenía 10 años. Ahora tenía 24 años y el único amigo que tenía ahora estaba muerto. ¿la cereza del pastel? Que todo era su culpa. Theo también se topó con otra noticia. <
. . .
Theo camino hasta el edificio incendiado. Los bomberos aun intentaban apagar los últimos vestigios del fuego de la noche anterior. Habían cerrado el paso, pero era imposible no ver la enorme nube de humo que vivía sobre el lugar. Theo había aprendido mucho en sus últimos 10 años de vida. Una de esas cosas era a identificar el desastre de un super y aquel incendio no sucedió por una fuga de gas. ¿Acaso Red Star había echo eso? ¿Pasaba por el vecindario y decidió desquitarse con el edificio? Tal vez. Theo lo conoció como Jordan, antes de que se hiciera llamar por un nombre tan estúpido como Red Star. Antes podría decir con seguridad que él no haría algo como eso. ¿Ahora? No estaba seguro. Después de todo él mato a Al. Algo estaba claro. Él tenía una responsabilidad. Debía corregir su erro de hace 10 años. No podía permitir que aquello volviera a suceder. Jordan tenía que morir. Pero necesitaba estar seguro de que fue Jordan. Necesitaba saber. Tenía que estar saber si una vez más había sido responsable de crear un monstruo. Preguntaba tonta. Ya lo sabía. Después de luchar con él la noche pasada, reviso cada momento y segundo en el que Jordan apareció en una cámara de seguridad. En ningún momento apareció cerca del edificio. No había indicio de que fuera el, pero ¿y si se equivocaba? Aun había una persona a quien podía preguntar. Tal vez ella lo sabía. Tal vez ella había visto algo. El problema era que él ODIABA a la gente y algo le decía que a ella la odiaría más que a cualquiera.