Todos, excepto Vaan, se sorprendieron en distinto grado al saber que el Dragón de Ilusión de Mil Nieblas estaba en ruinas.
Se decía que el Dragón de Ilusión de Mil Nieblas, inmune a ataques tanto físicos como mágicos, había sido derrotado por las Brujas Caídas.
Eso probaba que la fuerza de las Brujas Caídas era extraordinaria.
—Me temo que las Brujas Altas ordinarias no serán rivales para las Brujas Caídas, y mucho menos las Brujas Mayores en Etapa Cumbre —dijo Astoria solemnemente.
Sin embargo, Aeliana no escuchó sus palabras porque estaba distraída por otro asunto.
—Puedo olerla; esa perra, la Bruja Caída Elvira, estuvo aquí —la mirada de Aeliana se agudizó rápidamente al percibir el hedor de Elvira.
No olvidaría el olor de esa persona, no después de haber sido torturada, cortada y experimentada por alguien con un fétido olor corporal durante tres años.
