La Desafortunada Emperatriz

"Es muy hermosa la nueva señorita, su majestad se sentirá muy satisfecho"

Las criadas están especialmente ruidosas esta mañana, todo por el nacimiento de la joven Ennieth Le Persa. Su Majestad el Emperador nunca vino a ver a su propia sangre, después de todo es un tirano que disfruta de la sangre de sus enemigos.

- De todas formas que es todo este ambiente. Me siento mareada por tanta ternura.

En la novela original Ennieth nunca tuvo ningún talento especial, sobre todo con la magia, era desafortunada en todos los sentidos.

Los Le Persa tenían una gran afinidad con la magia, sus conexiónes con el mana eran puras. Era todo un honor para la familia que un heredero tuviese dicha conexión, debía ser Ennieth... pero, eso no era posible.

- Tengo un gran problema entre manos (No puede caminar)

La dama de honor de la pequeña Ennieth, Sofía Cernet dió su vida por demostrar la inocencia de su princesa en todo momento. Era de esperarse que Ennieth busque venganza contra su familia. El nacimiento de la segunda hija del Emperador sería su colapso.

Ennieth Le Persa es una hermosa chica de pelo escarlata, sus ojos amarillos destacan demasiado por su afinidad con la magia *Se que dije que no tenía ninguna, sin embargo en la novela se describe un poder oculto en el alma de la chica* su piel blanca destaca sobre todo.

Sofía - Hola mi joven princesa, está muy hermosa el día de hoy.

- Ya me acostumbré a que Sofía me cargara, tanto que siento molestias con otras personas.

- Bueno, también porque no soporto tantas miradas tiernas (-__-)

Hubo un día, dónde debía aprender sobre la magia, en la novela original no menciona nada sobre eso, más bien Ennieth obtiene sus poderes de casualidad, en un evento algo trágico.

Los principios de la magia son simples, todos los seres poseen un núcleo de mana pueden manipular el milagro de cualquier forma. Sin embargo sólo aquellos con un alto mana tienen la capacidad de desarrollar un nivel de magia más avanzado.

Mansión Le Persa

El día estaba agitado, la joven Ennieth cumplía cuatro años, era una tradición celebrar un banquete en el palacio real, sin embargo el Emperador no deseaba ver a la chica.

- Ese maldito bastardo ¿No estás contento con tu hija verdad?

Eran muy ruidosos, así que pedí a Sofía que me llevase lejos de todo lo molesto. Los jardines de la mansión eran muy hermosos, las rosas escarlata crecían allí cada primavera. Mi madre siempre decía que el mana aumentaba en un lugar afin a tu alma, tal vez tenga razón... tal vez no.

Sofía - No vaya muy lejos princesa.

- Ya lo sé, no soy una niña. *Tal vez en aspecto físico sí*

Los eventos principales de la novela aún no comienzan, recuerdo que fue después del debut de Ennieth a la alta sociedad, tengo hasta entonces para cambiar las cosas. La joven Le Persa creció sin ninguna figura paterna, mientras más aprendía, más era su rencor contra la familia real. Antes de su debut, la chica pasó por muchas dificultades y acosos por parte de los seguidores de la familia real, esos malditos... van a pagarlo.

Hablando de resolver problemas, mi núcleo de mana era inestable, supongo que de ese defecto nace el poder oculto en el alma. Tanto el mana como el alma estan relacionados entre sí, es la coexistencia de ambos los que permiten que el milagro ocurra. Debería comenzar a moldear mi alma, así dominaré este poder mucho antes.

Pasé las noches practicando como desfigurar el alma en forma de mana, el proceso era agotador, más para una niña de cuatro años. Mi cuarto cumpleaños pasó rápido, al día siguiente todo regresó a ser como siempre, con la única diferencia de que ahora el cuerpo de Ennieth estaba cambiando, gracias a mí, nacería la primera prodigio de los Le Persa, una chica con un mana monstruoso.

Ennieth Le Persa, 6 años

Y así como parpadear ya habían pasado dos años, ahora dominaba una cuarta parte del mana en el alma, gracias a esto era imposible detectar algún poder en mí *Tampoco es buena idea rondar por la mansión con semejante cantidad de mana*

A menudo los sirvientes de la mansión me observaban, estaban cautivados con mi belleza, no digo que sea malo pero me molesta el hecho de que no tenga tiempo a solas para practicar.

Mientras caminaba cerca del lago, allí agachado se encontraba un chico melancólico, su pelo blanco resalta sobre todo el paisaje, una cola de caballo atada a su cabello, ojos negros y una expresión vacía. Este era el segundo hijo del Emperador, seremos un total de cuatro hermanos, cada uno mas destacable, todo hasta que su segunda hija nazca. Ella opacará incluso a las nobles más hermosas del imperio, sin mencionar su gran intelecto y capacidad para dominar el mana.

- Maldición, no quería encontrar al príncipe ahora mismo. *Supongo que estoy adelantando algunos eventos*

Para no parecer descortés me inclino con reverencia ante el chico. Simplemente me ignora ('-_- )...

- ¿Que hace por aquí el día de hoy príncipe? *Mantén los modales Ennieth*

Arnald *Ignorando*

- ¡Otra vez me ignora!

Arnald - Eres muy molesta.

- *¡¿Eso es todo lo que dirás?!*

En la novela original, Arnald siempre mantuvo una actitud fría con Ennieth, y creo saber el por qué. Desde un inicio era la chica la heredera al trono por sucesión real, sin embargo el Emperador negaba a su hija como la futura emperatriz, Arnald siempre buscó el amor de nuestro padre, creo que un dia lo encontró *No lo sé, nunca fui buena entendiendo sobre los sentimientos*

Los días pasaron con rapidez, mi avance se vió interrumpido por un incidente un tanto molesto. Todo comienza cuando fui invitada a la fiesta de té de la joven Letisha Granell, hija del marqués de Granell y primer ministro del imperio.

Sofía - Llegó una carta para usted princesa, es de la señorita Letisha Granell.

- La señorita Granell ¿Que querrá? *Bueno, debemos fingir asombro*

Autor-kun: Premio a mejor actriz :3

Sofía - Debemos preparar a la señorita para su primera fiesta de té.

Ropa de encaje color rojo, pelo recogido, maquillaje de muñeca, labios rojizos, una gran pamela que contrasta con la ropa, adornada con rozas blancas y rojas.

¡KYAAAH! LA SEÑORITA SE VE MUY HERMOSA... NUESTRA PRINCESA ES LA MÁS HERMOSA.

- *Tampoco es para tanto, no hay que exagerar*

El carruaje estaba listo para llevarme a la mansión Granell, por un momento pude ver la silueta del Emperador en la mansión *¿Habra sido una ilusión?*

Se supone que no vería al Emperador hasta mi fiesta de debut ¿Que pasaría si estuviese mucho antes en la mansión? Dejaré eso para después, ahora me concentraré en el evento que está por ocurrir, sólo espero evitar los problemas.

Mansión Granell

Por supuesto no era la única invitada, muchas otras chicas de la alta clase vinieron para la fiesta de té *Agh... Odio estos eventos absurdos*

En la novela pasaba muy a menudo, todas las damas de la aristocracia se reunían para conversar sobre sus logros, amoríos o para presumir sus altos rangos, esto me molestaba demasiado. La antigua Ennieth buscaba encajar en todas esas conversaciones, llegando a mentir en algunos casos, pero ahora yo soy Ennieth.

Letisha Granell - Les agradezco a todas por asistir. Y principalmente a Su Majestad la princesa.

- No sea tan formal señorita Granell, por favor trátame como las demás. *Sí, se que esto es pura actuación*

"Escucharon sobre Lord Fredix, dicen que es un chico muy guapo. Espero conocerlo algún día"

"Sí, sí... Opino lo mismo"

"¿Creen que tenga oportunidad de ser vista por él?"

- *Ah, quiero irme de aquí*

"¿Usted que opina princesa?"

- Una pérdida de tiempo. *¿Ah? ¡Maldición! ¡Pensé en voz alta!*

Letisha - Bueno, supongo que Su Alteza no está interesada aún en compromisos.

- De todas formas aún tengo que crecer mucho, no es hasta mi debut que puedo comprometerme. *Tomando té para disimular*

"Ya veo, Su Alteza planea buscar un perfecto acompañante para su debut"

- *Supongo... Eso creo*

Mientras pasaba el tiempo yo sólo sentía más ganas de salir de allí *¡Alguien sálveme!*

Mi cuerpo dolió en ese momento, cuando llevé la tasa de té a mi boca, pude ver la sangre esparcida en la bebida *¿Eh?* Nunca mencionaron nada sobre esto en la novela, al mirar al frente pude ver las caras de terror. Mi visión se nubló, no recuerdo más nada de ese momento.

Autor-kun: ¿Que le pasa a nuestra flor escarlata? :(