Después de dejar la casa de Lin Qiong, Li Yifei todavía sentía un deseo ardiente que no podía saciar. Durante los últimos días, había estado viviendo con Xu Yingying, una mujer hermosa a su lado a la cual solo podía mirar pero no tocar, lo que ya lo había llenado de frustración. Sumado a las provocaciones de Lin Qiong, ahora buscaba desesperadamente una manera de desahogarse.
Lo natural hubiera sido ir con su novia Su Yiyi, pero Li Yifei no tomó esa opción. Arousar sus deseos con otra mujer y luego liberarlos en Su Yiyi le parecía inherentemente injusto para ella. Además, era la primera vez de Su Yiyi; Li Yifei quería crear una atmósfera muy especial con ella, no solo actuar según sus impulsos.
Por supuesto, Li Yifei tampoco tenía ganas de buscar una aventura de una noche en un bar. Teniendo novia, no podía seguir como antes.
