En una noche sin luna en Seúl, un joven vestido con el uniforme del instituto se encuentra al borde de la azotea de un rascacielos. La ciudad se extiende bajo sus pies, sus luces titilantes parpadean en la oscuridad como estrellas terrenales. Cada destello parece luchar por atravesar la densa neblina de desesperación que lo envuelve.
Con ojeras profundas y un parche de hidrogel en el costado izquierdo de su rostro, sus heridos labios se separan en un susurro ahogado por el frío viento nocturno.
"¿Cuándo fue la última vez que sentí tanta paz...?", su voz apenas un susurro en el viento.
Una ráfaga de viento frío azota su cabello azabache, y el zumbido distante del tráfico llego a sus oídos. Desde la calle, el sonido de una sirena de policía se cuela en sus pensamientos, recordándole el caos constante de una ciudad que nunca duerme. El joven baja la mirada hacia sus manos temblorosas, notando rastros de sangre seca.
Miestras miraba sus manos, por el rabillo del ojo vio su teléfono inteligente, que descansa en el borde de la azotea, emitiendo una luz intermitente, señal de mensajes sin leer. Las palabras en la pantalla parpadean, pero él no tiene la fuerza para alcanzarlo. Con cada segundo que pasa, el peso de sus problemas parece empujarlo más hacia el abismo.
El joven alzó su mirada hacia el horizonte. Por un momento sus ojos brillaron con anhelo y esperanza, observando un futuro deseado pero fuera de su alcance. Lentamente, cierra los párpados y da un paso hacia el vacío, inclinándose hacia el abismo frente a él hasta que su cuerpo cae inevitablemente fuera de la azotea.
El viento ruge en sus oídos mientras siente la gravedad tirando de su cuerpo hacia abajo.
Durante la caída, sus ojos se abren de golpe, atraídos por una extraña sensación. Un cúmulo de partículas de luz lo envuelve, y en un instante, el joven desaparece en medio del aire junto con las partículas luminosas.
***
Podría jurar que por un momento creí haber muerto.
No sentía mi cuerpo, pero era capaz de "sentir".
Esta sensación era nueva para mí; fue como si sintiera a través de mi alma y no de mi cuerpo. No tenía "ojos" pero podía "ver" el reino de oscuridad en el que me encontraba, allá a donde mires, solo había oscuridad.
De repente, el reino de oscuridad donde me encontraba, desapareció, y como si algo me hubiera estado sosteniendo, me encuentro suspendido en el medio del aire de la sala de estar de mi apartamento. Sin previo aviso, ese algo dejó de sujetarme y caí al suelo, encogiéndome de dolor. Estaba seguro de haber dado un paso fuera de la azotea y caer del edificio, pero ahora estaba de vuelta en casa, en el piso de la sala de estar.
¡Swoosh!
Sientí como si un ser vivo se hubiera acurrucado en mi estómago y levantara la cabeza. Mis párpados se estrechan por el dolor que se genera en mi abdomen, extendiéndose al resto de mi cuerpo. El dolor es soportable, pero disminuye mis fuerzas, impidiéndome moverme o levantarme.
Por extraño que parezca, es una sensación refrescante, pero al mismo tiempo, sentí como si una semilla extraña estuviera brotando dentro de mi. Es una sensación nueva, como si en mi abdomen se estuviera reuniendo un doloroso pero refrescante calor.
Con mi vista reducida, pude observar una pantalla transparente frente a mí.
Una voz extraña resuena en mi mente.
[Iniciando proceso del despertar]
¡Boom!
Un cúmulo de calor explota dentro de mi, extendiéndose rápidamente en todas direcciones. Siento que algo cambia radicalmente dentro de mi. De repente, mi cuerpo empieza a torcerse y convulsionar. Un dolor feroz, como si millones de agujas me perforaran simultáneamente me azotó, haciéndome gemir de agonía. El dolor es inimaginable, muy diferente a cualquier golpe que he recibido.
Me aferro a mi conciencia mientras mi cuerpo se retuerce y convulsiona en el suelo. De un momento a otro, recuerdos de mi infancia pasan por mi mente como una película.
***
4 de marzo del año 2015, el día en que mis padres murieron en un accidente de tráfico, el día en que todo empezó a salir mal.
El funeral de mis padres fue el peor día de mi vida. Las personas reían como si nada malo hubiera sucedido, como si mis padres no hubieran muerto. A ellos ni siquiera parecía afectarles. Incluso familiares cercanos me miraron con condescendencia y desdén, como si no tuviera importancia, como si no tuviera el más mínimo valor.
Era insoportable. Todos reían y bebían, no parecían tristes por la muerte de mis padres, era una celebración. Esos malditos hipócritas estaban celebrando la muerte de mis padres, a pesar de que ellos siempre los habían tratado con amabilidad y respeto.
Quería creer que reían por alguna razón comprensible, quería creer que mis padres no hubieran querido que nadie se entristeciera por su culpa. Realmente quería creer eso, pero esa falsa esperanza se desvaneció cuando mi abuelo dijo que viviría solo, en un penthouse que mi padre me había dejado como herencia. Además del penthouse, heredé suficiente dinero como para vivir cómodamente el resto de mi vida.
Mi abuelo se convirtió en mi tutor legal, pero prácticamente me dijo: "Toma, y no causes problemas durante el resto de tu vida."
Todos me dieron la espalda.
Ese día comprendí la realidad, no tenía a nadie. A nadie le importaba que mis padres hubieran muerto.
Aún así era extraño, el único día en que mis padres me dejaron al cuidado de mi abuelo, ellos tienen un accidente de tráfico y fallecen. No podía culpar a nadie, no tenía pruebas de que no fuera un accidente. No tenía nada ni a nadie, solo a mí mismo.
***
Los recuerdos sirvieron como un ancla, manteniéndolo consciente. Con un esfuerzo sobrenatural, el joven se recompone y se sienta, dejando que el odio y el rencor fluyan a través de él y sirvan de combustible para resistir el dolor.
Su esqueleto está cambiando, las articulaciones de su cuerpo se reajustan, sus músculos se suavisan y luego vuelven a ser firmes. Una sustancia negra pútrida rezuma de su piel desgarrada. Todas las impurezas de su cuerpo han sido eliminadas, y sus músculos y esqueleto han sido refinados.
El dolor es terrible, pero no se compara con el sufrimiento que ha tenido que cargar hasta ahora. Después de lo que parece una eternidad, el proceso finalmente llega a su fin.
[Despertar completado]
[Tu proceso de despertar está incompleto. Progreso actual: 5%.]
[Su cuerpo actual es inadecuado para completar el proceso del despertar. Refina tu cuerpo para completar el proceso del despertar. A medida que su cuerpo mejore, el progreso del despertar también avanzará.]
[Tu estado actual es
[Tus habilidades físicas han mejorado parcialmente.]
[Sus rasgos han sido confirmados.]
[Sus habilidades han sido registradas.]
[Has adquirido las calificaciones del jugador.]
[Puedes comprobar tu ventana de estado diciendo la frase de activación "Ventana de estado" y para cerrar la ventana, desliza tu dedo sobre la ventana.]
El joven no estaba en condiciones de concentrarse en lo que decía la extraña voz que resonaba en su mente. Los fuertes sentimientos todavía permanecían en su mente después del intenso dolor, pero no podía apartar los ojos de las pantalla frente a él.
Cuando el joven logró calmarse, observó detenidamente una de las pantallas frente a él.
Kim Kyeong-Jae
Edad: 17
Lvl: 0
Maná: 390/390
Fatiga: 0/100
Atributos:
Fuerza: 22
Agilidad: 25
Constitución: 23
Inteligencia: 29
Suerte: 45
Rasgos:
- Antigua Sangre, Prodigio de las Artes Marciales
Inventario:
- Vacío
Habilidades:
- Ojos Demoníacos (C-, 0.00) , Fortalecimiento de los Sentidos (D, 0.00) , Manipulación de la Sangre (D-, 0.00) , Regeneración (B+, 0.00) , Sed de Sangre (A-, 0.00) , Mordedura vampírica (D-, 0.00)
Títulos:
- Despertado Primordial
Puntos de Experiencia: 0 / 100
Puntos de Atributos Disponibles: 0
La expresión del joven se volvió oscura con una mirada fría. Sentía curiosidad por la pantalla frente a él, pero aún recordaba el terrible dolor que había sentido. Cerró los ojos e intentó tranquilizarse.
"Es inútil enojarme con una pantalla.", pensó con fastidio mientras suspira.
Decidiendo ignorar la pantalla transparente, se levantó del suelo. Inmediatamente notó una sensación de ligereza en su cuerpo. Sin darle importancia, caminó por la sala de estar, pero se detuvo de repente. A través de los amplios ventanales de su penthouse, las vistas panorámicas de la ciudad de Seúl se extendían ante él.
La vista nocturna de la ciudad, iluminada con diferentes colores, atrapó su atención. Sus ojos se abrieron de par en par al encontrarse con su reflejo en los ventanales. Se acercó rápidamente a su reflejo, las heridas en su rostro habían sanado, la magulladura en su labio inferior había sanado por completo, las ojeras desaparecieron. Su antes descuidado y sombrío rostro ahora era radiante y suave como la porcelana. Lentamente, acercó su mano al parche en su rostro y lo retiró cuidadosamente. La herida había sanado.
Era absurdo, pero estaba seguro de lo que veía. Sus heridas habían sanado y el cansancio de su rostro había desaparecido. Su corazón latió desenfrenado ante la absurda situación.
¿Qué demonios había pasado con su cuerpo? Había intentado suicidarse, entonces, ¿por qué seguía vivo?
[Tu rasgo,
Uno de los rasgos de Kyeong-Jae lo ayudo a tranquilizar su mente. Los minutos pasaron y decidió experimentar con la pantalla.
Kyeong-Jae observó en silencio el panel frente a sus ojos.
"Entonces, esta es la ventana de estado", murmuró mientras investiga el panel.
La ventana de estado tenía 5 pestañas etiquetadas como "Rasgos", "Atributos", "Habilidades", "Inventario" y "Títulos".
Los Rasgos mostraban la personalidad o el talento del jugador.
La pestaña Atributos mostraba una evaluación de las capacidades del jugador.
Habilidades mostraba las habilidades estandarizadas que había obtenido.
"Es como un juego."
Inventario mostraba casillas vacías que podían ser llenadas con Ítems.
Y por último, la pestaña de Títulos mostraba los logros que había obtenido.
Kyeong-Jae presiona su dedo sobre su rasgo [Antigua sangre] y una nueva ventana apareció con información sobre su rasgo.
[Rasgo: Antigua sangre]
[La sangre perteneciente a antiguos vampiros de sangre pura, los Vladar. Convierte al usuario en un vampiro del linaje
Beneficios del Título:
- Incrementa un 20% el poder de todas las habilidades mágicas.
- Regenera vida al beber sangre.
- Incrementa la resistencia mágica en un 35%.
-Aumenta los atributos de
- Resistencia a Estados Alterados Inferiores.
- Aumenta todos los atributos en un 50% durante la noche.]
La descripción de su rasgo no respondió a todas sus preguntas, pero había notado que la mayoría de sus habilidades estaban relacionadas con el poder de un vampiro.
Los rasgos mostraban la personalidad o el talento de un jugador, pero uno de los rasgos de Kyeong-Jae lo había convertido en un vampiro. Se suponía que su rasgo lo había convertido en un vampiro, sin embargo, no era capaz de notar la diferencia.
Kyeong-Jae estaba un poco familiarizado con el término "ventana de estado". Los juegos con ese sistema eran muy conocidos últimamente, incluso él solía jugar esa clase de juegos hasta hace unos meses.
Kyeong-Jae deslizó su dedo sobre la ventana de estado, haciendo que desaparezca. Cerró sus ojos y se concentró.
"
En el momento en que Kyeong-Jae pronunció el nombre de la habilidad, abrió sus ojos.
[Tu habilidad,
Sintió su alrededor con más claridad y amplitud. Era como si algo se hubiera expandido. Alzó sus manos y las observó, algo en su cuerpo se sentía extraño. Se concentró en su cuerpo mientras cerraba sus ojos. Sentía vagamente cómo su sangre fluía por sus venas como las aguas fluyendo por un río, y logró escuchar el bombeo de la sangre en su corazón.
Kyeong-Jae abrió sus ojos y se preguntó a sí mismo. "¿Este... es el poder del despertar?"
La habitual expresión indiferente del joven había cambiado completamente, su mirada estaba llena de fascinación mientras una sonrisa ligera se erguía en sus labios.
Kyeong-Jae recibió una nueva ventana de notificación.
[La competencia de la habilidad,
Los ojos de Kyeong-Jae se abrieron ligeramente con sorpresa.
"¿Mi dominio sobre las habilidades aumenta cuando las uso...?", murmuró dándose cuenta de lo que sería capaz de lograr si maximiza sus habilidades. Con un dominio mínimo sobre sus habilidades, había logrado sentir su sangre fluir por sus venas y escuchar el bombeo de la sangre en su corazón.
De repente, sus pensamientos fueron interrumpidos cuando escuchó la alarma de su teléfono sonando desde la cocina, un recordatorio de que debía dormir y despertar temprano para ir al instituto.
Kyeong-Jae no pudo evitar suspirar con pesadez mientras desactiva su habilidad.
Sin embargo, no tardó en ducharse y dirigirse a su cama, hasta quedar dormido.
Aunque este giro en su vida era absurdo y cualquier persona normal no podría consiliar el sueño en esta situación, Kyeong-Jae no le daba demasiada importancia a su situación y decidió dejar que su yo de mañana se encargue de comprender más la situación en la que se encontraba ahora.
Y por si fuera poco, Kyeong-Jae era bueno para "predecir" el futuro, tenía la capacidad de analizar sobre la marcha en cuestión de segundos una serie de posibles situaciones que podrían suceder y en esas posibilidades solo vio como su rutina diaria cambiaría significativamente. Lo más seguro es que esta capacidad de Kyeong-Jae se desarrollo a base del miedo de no estar preparado para enfrentar una situación desastrosamente inesperada, sin embargo, para él esta capacidad era más que bienvenida. Después de todo, en repetidas ocasiones esta capacidad de predecir el futuro le fue de mucha ayuda.
***
Desde las profundidades de la Tierra, el Maná, el elemento básico que conforma la base del mundo. Una energía que estuvo durmiente en el núcleo del planeta, se filtra hacia la superficie, nutriendo la naturaleza y reparando discretamente las heridas que la humanidad había infligido al planeta. Las grietas en la capa de ozono comenzaban a cerrarse lentamente, como si una mano invisible estuviera tejiendo un manto de protección sobre la atmósfera.
En los bosques, los árboles enfermos y marchitos recuperaban su verdor, sus hojas volvían a brotar con una vitalidad renovada. Los ríos contaminados empezaban a purificarse, el agua lentamente volvía a fluir cristalina y llena de vida. Los animales, en su mayoría ignorantes del cambio, se beneficiaban de un entorno cada vez más saludable y próspero.
Las ciudades, bulliciosas y activas, experimentaban un cambio sutil pero notable. Los niveles de contaminación disminuían, el aire se volvía más limpio y respirable.
Era como si el maná estuviera restaurando el equilibrio natural del mundo, curando las cicatrices dejadas por la industrialización y el abuso ambiental. La humanidad, aún ajena a esta fuente de poder invisible, seguía con su vida cotidiana, sin saber que un cambio profundo estaba ocurriendo bajo sus pies y en su entorno.
Y en medio de este cambio global, Kyeong-Jae, sin saberlo, se había convertido en el catalizador de una nueva Era. Mientras duerme, el mundo a su alrededor comenzaba a cambiar, impulsado por el mismo maná que ahora fluía dentro de él.