¡Drako, cuidado!" gritó Mark.
"¡Gracias, Mark!" Respondí, preparándome para el combate."¡Ciro, Vin! ¡Ahora!" ordenó Bakar.Ciro comenzó a susurrar un hechizo: "Invoco a los espíritus del viento y del más allá, préstame un poco de tu calor para este conjuro. ¡Hyacintho ignis turbo!""Bien, Ciro y Vin, Dek aguanta un poco más. Drako y yo atacaremos por los lados mientras Ciro y Vin nos potencian. ¿Listo, Drako?" dijo Bakar."Estoy listo, Bakar", respondió, decidido."¡Vamos entonces! ¡HAAAAA!" gritó Bakar, lanzándose al ataque."¡Dek, necesito tu ayuda! ¡Rápido!" exclamó."¡Muévete, Drako! ¡Cruentum gladium!" Dek blandió su espada con fuerza."Gracias, Dek. Bakar, ¿necesitas ayuda?" preguntó."No te preocupes, chico, estoy terminando", respondió Bakar.Esa batalla había sido agotadora, pero emocionante a la vez. "Oigan, una pregunta: ¿Cuánto falta para el segundo piso y cómo es?""¡Drako, esas fueron dos preguntas!" Río Bakar."Sí, sí, ya sé, pero ¿me las va a responder, señor Bakar?" insistí."Bueno, nos faltarían alrededor de diez minutos. Y sobre tu otra pregunta, el segundo piso es similar a este, solo que con lagos y ríos. Y sí, pueden haber monstruos, aunque es muy raro. Desconozco sus nombres, pero eso es Todo lo que sé. Ahora no te quedes atrás y sigue caminando", explicó Bakar."Entiendo, señor Bakar. Ya voy". Respondí, esperando no encontrarme con ningún monstruo. Estaba cansado y quería llegar pronto al quinto piso para poder descansar y comer algo delicioso. Mientras más lo pensaba, más hambre me daba (mi estómago sonó)."¡Mira, Drako! ¡La entrada al segundo piso, por fin!" exclamó Bakar con una sonrisa. "¡Vamos, apúrate, hay que entrar!"Con renovadas energías, me apresuré a entrar al segundo piso, cada vez más cerca de mi objetivo: llegar al quinto piso.