CAPÍTULO 229
~Punto de vista de Zara~
Cuando hice eso, Nieve inhaló profundamente, y mi corazón dio un vuelco. Mis acciones le afectaban y me siento tan bien y empoderada en este momento.
—Me estás volviendo loco —murmuró, y el calor en su tono me hizo estremecer.
Me puse de pie y me giré para enfrentarlo, una sonrisa traviesa en mi rostro.
—Tu turno —su ceño se frunció, y luego una sonrisa se extendió por su rostro—. Te mostraré lo mío si tú me muestras lo tuyo.
Alcanzó el teléfono y lo colocó en su soporte junto a la mesa de noche para que pudiera verlo, sentado en su cama.
Nieve llevaba solo un par de pantalones y una camiseta negra, que marcaba su cuerpo musculoso, y la vista de él era suficiente para hacer que mi corazón diera un vuelco.
—Ahora, cariño, muéstrame más —Muéstrate más—le dije juguetona y lentamente me giré para darle otro vistazo a mi trasero.
Escuché un gruñido profundo venir de él y cuando miré hacia atrás, sus ojos ardían de deseo.