CAPÍTULO 209
~Punto de vista de Zara~
Las llantas crujieron contra la grava cuando me detuve frente a la mansión. Mis manos agarraban firmemente el volante, mi corazón aún acelerado por la conversación con Siona mientras esperaba que se abrieran las puertas.
Sus palabras resonaban en mi cabeza, cada una un recordatorio del peso que ahora llevaba. Había pensado que mi vida era y sería simple, pero no.
No fue así. En lugar de eso, desde que conocí a ese escoria, Iván, hasta ahora, todas mis decisiones y acciones han sido cualquier cosa menos simples.
Antes de que pudiera ordenar mis pensamientos, la puerta principal se abrió de golpe, y Nieve salió corriendo, su silueta iluminada por el suave resplandor de las luces del porche.
Conduje hacia el interior del complejo, deteniéndome frente a la casa.