CAPÍTULO 85
~Punto de vista de Tempestad~
Aira llevaba un bikini verde pálido que mostraba su hermoso cuerpo, mientras que el de Zara era más modesto, un traje de una pieza con tirantes finos y un color azul profundo que combinaba con sus ojos. Ambas se veían serenas y sin esfuerzo, contentas.
Y aquí estaba yo, cruda, todavía intentando borrar todo rastro del ayer.
Mi pecho se apretó, celos, resentimiento, y algo que no podía nombrar, todo alimentando mis pensamientos. No podía soportarlo, verlas tan fácilmente y libres.
Aira, mi gemela, la que tenía todo lo que yo no tenía, amor, bondad, fuerza que no provenía de la ira, parecía disfrutar más que yo.
Me giré, lista para volver a donde había venido antes de que pudieran verme.
—¡Tempestad! —la voz de Aira cruzó el espacio, deteniéndome en seco. Su tono era suave pero teñido con algo que no me permitía ignorarla.
Demasiado tarde.
Respiré profundo, enmascarando mis emociones lo mejor que pude, y me volví a enfrentarlas.