CAPÍTULO 160
~Punto de vista de Zara~
La suave luz del amanecer se filtraba a través de las cortinas, tiñiendo la habitación de tonos cálidos. Solo que no era mi habitación.
Era... Me detuve. Insegura de a quién pertenecía esta habitación cuando algo afilado recorrió mi cerebro.
Mi cabeza se sentía pesada, un dolor sordo palpitaba en mi sien, y mi cuerpo parecía haber sido pesado con plomo.
Me moví ligeramente, mi conciencia atada entre los restos de un sueño y la realidad. El sueño persistía, vivido y extrañamente inquietante.
Estaba de vuelta en el momento en que mi vida terminó—mi vida pasada. Los rostros de Ivan y Clarissa se alzaban ante mí, sus expresiones torcidas con malicia mientras asestaban el golpe fatal.
El dolor era tan agudo como lo había sido entonces, una traición ardiente cortando más profundo que cualquier herida física.
Pero el sueño no se detuvo allí.
En cambio, me llevó más allá del velo de la muerte, revelando fragmentos de lo que sucedió después.